Este miércoles se desarrolló en todo el país una nueva jornada de movilización convocada por la CONFECH, en demandando un transformación profunda en las reformas en materia de Educación Superior propuestas por el gobierno, junto con dar cuenta de nuevas acciones en caso que las demandas de los estudiantes no son consideradas en el mensaje presidencial del próximo 21 de Mayo.
En Santiago la convocatoria alcanzó, al menos, las 100 mil personas, lo que se repitió, proporcionalmente, en cada una de las regiones del país.
Al mismo tiempo, la convocatoria entregó un ferviente apoyo a la movilización de los habitantes de Chiloé, que por 10 días mantienen tomados los accesos al archipélago en protesta por la contaminación provocada por la industria salmonera y la serie de demandas históricas no resueltas con el archipiélago.
«Hasta ahora ni siquiera hay reforma, acá no hay obra gruesa. La ministra Delpiano debe asumir la responsabilidad de construir esta reforma junto a las fuerzas sociales», señaló la presidenta de la FECH, Camila Rojas. Al mismo tiempo tiempo, Rojas señaló que de no existir señales del gobierno, antes o durante el mensaje presidencial del 21 de mayo, la movilización se radicalizará iniciándose un proceso de tomas de establecimientos.
Si bien la marcha fue pacífica, ésta fue cortada por la acción de Fuerzas Especiales en Santa Rosa con Alameda, frente a la Universidad de Chile y en Echaurren con Alameda, donde se encontraba instalado el escenario para el acto central, el que finalmente no se llevó a cabo.
Al respecto la presidenta de la FEUSACH, Marta Matamala señaló que «Mientras Bachelet pasea x Europa, Burgos nos reprime. Al movimiento estudiantil sólo le queda responder con radicalidad».