Miles de estudiantes movilizados, haciendo uso de sus derechos como ciudadanos, se ven afectados porque no están recibiendo las becas de alimentación y mantención que el Estado debe asegurarles por ser de situación vulnerable.
Hace ya cinco días que debieron haber depositado la carga de 26 mil pesos para que alumnos de escasos recursos solventaran sus gastos en alimentación mensual. Sin embargo, la imposición del ministro de Educación, Felipe Bulnes, de cerrar el semestre antes del 7 de octubre, determinó que la Junaeb (Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas) no depositara las becas a quienes no han terminado el primer semestre y por tanto, tampoco iniciaran el segundo.
En un comunicado emitido por la página web de la institución se aclara que se canceló el dinero a todos los estudiantes que cumplen el requisito legal para este beneficio. Es decir, se encuentran en condición de alumno regular y no ha cesado su actividad docente.
La Junaeb se respalda bajo la resolución exenta N° 118 del año 2010 que establece las normas que regulan las Becas de Mantención para la Educación Superior, en su artículo 8, párrafo 2, señala: «Si la Institución Superior en que se encuentre matriculado un becario suspende temporalmente su actividad docente, los beneficios que otorga la Beca serán suspendidos por el período correspondiente».
El director regional de la Junaeb en la Araucanía, Ricardo Barría, dijo que para recibir el beneficio los jóvenes deben tener la certificación de que son estudiantes. Barría explicó que por decreto el beneficio se entrega a alumnos, y “si ellos no están en clases cometeríamos una ilegalidad al pagar el beneficio. Hay muchos alumnos que se retiran de los establecimientos el segundo semestre”.
La encargada de comunicación de la Junaeb en Santiago, Verónica Ruz, no quiso referirse al tema.
ESTUDIANTES NO BAJAN LOS BRAZOS
Tenemos hambre, queremos comer, no nos han cargado la beca Junaeb, gritaban estudiantes que se congregaron al mediodía de hoy, 5 de octubre, en las afueras de la Junaeb de Providencia, ubicada en Antonio Varas.
Al menos 30 jóvenes universitarios se reunieron hoy, afuera de la Junaeb para realizar una olla común. Con pancartas y cacerolas los estudiantes exigían devuelta sus becas, mientras un grupo de cocineros preparaba una sopa para compartir con los indignados estudiantes.
La idea surgió desde la carrera de derecho de la Universidad de Chile quienes organizaron esta manifestación pacífica para solidarizar entre ellos y para hacer público su descontento con el gobierno por quitarles la comida.
Ricardo Morales, quien se vino a estudiar a Santiago desde Curicó opinó cómo se ven afectados miles de alumnos que, hasta el momento, perdieron sus beneficios. “Con la beca, me hago el presupuesto para la semana para comer, tomar once, desayunar y para la locomoción. Además como estudiante de región tengo gastos extra para mis padres como lo es la pensión”, comentó.
El joven al igual que la mayoría de los estudiantes piensa que esta es una medida de presión para bajar el movimiento, pero de parte de ellos “habrán ideas para activarlo y rehabilitarlo a pesar de las amenazas”, afirmó Morales.
Apuntando a aquello, Gabriel Boric, del senado universitario, expresó que esta medida es una “falta de voluntad política de parte del Gobierno, porque de manera encubierta están haciendo un chantaje para que se baje el movimiento y la mesa de diálogo”.
Durante la manifestación se entregó simbólicamente un vaso de sopa al presidente del sindicato de trabajadores de la Junaeb, Danton Vera, para demostrar que el conflicto no es con ellos sino que con quien les da las ordenes. Al respecto Vera indicó que hay voluntad de parte de los funcionarios hacia los estudiantes, “esto viene de la dirección política y no de la técnica. Como institución no estamos cerrados en el tema porque tenemos hijos universitarios que también están movilizados”.
Los estudiantes no se quedan sólo con las manifestaciones pacíficas. Un grupo de estudiantes de quinto año de derecho de la Universidad de Chile empezó a gestionar la realización de acciones jurídicas en contra de la Junaeb ante la injusticia. Natalia Reyes, estudiante y participe de esta iniciativa dijo que al menos 50 personas están trabajando para ello. “En el aspecto legal es bastante factible que podamos revertir la situación que ocurre. Pensamos presentar un recurso de protección a la contraloría la próxima semana”, manifestó Natalia.
La estudiante dijo que el 28 de septiembre se envió una renovación de la beca, certificando que los estudiantes son alumnos regulares de las instituciones, pero ésta se rechazó porque no estaba textual la petición y por “puras pequeñeces”.
Esta situación ocurre en todas las universidades movilizadas que no han iniciado el segundo semestre: Universidad de Los Lagos, Universidad de Antofagasta, Universidad Tecnológica Metropolitana, Universidad de Playa Ancha, Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, Universidad de La Serena, Universidad Católica del Norte, Universidad de Chile, Universidad Católica del Maule y Universidad del Bío Bío.
IRREGULARIDADES EN LA ARAUCANÍA
Estudiantes de la Federación Mapuche de Estudiantes (Femae) denuncian que no están recibiendo la beca Presidente de la Republica (BPR) y Beca Indígena (BI). Pablo Millalén, werkén (mensajero) de la Femae informó que a estudiantes de la Ufro (Universidad de la Frontera) y de la Universidad Católica de Temuco no han recibido la beca en los meses de septiembre y octubre. “Esta es una medida arbitraria, porque afecta a los estudiantes más vulnerables. Pero, ante las presiones no nos vamos a bajar porque nuestras demandas son estructurales y exigen temas de fondo”.
El toqui Huenulef Millao, que estudia derecho en la católica de Temuco, explicó que la gente de su carrera está recibiendo el beneficio porque ya empezaron el segundo semestre, pero varias carreras siguen movilizadas que no corren la misma suerte.
El director de la Junaeb en la Araucanía dijo que la única irregularidad que ocurre en la región es en la universidad bolivariana porque ellos hicieron su proceso de renovación el 20 de septiembre. Barría a la vez, hizo un llamado a que los estudiantes movilizados “simpatizaran” con sus compañeros para que pudieran terminar el semestre y así empezar el segundo para que pudieran recibir las becas.
Por Estefani Carrasco Rivera
El Ciudadano