Centenares de niños y niñas de las escuelas de cinco municipios de la prefectura japonesa de Fukushima, retomarán sus clases, luego de siete años de permanecer cerradas estos centros educativos, debido al mayor accidente nuclear ocurrido en la nación asiática.
La cadena estatal NHK, informa que está previsto que alumnos de las enseñanzas de primaria y secundaria vuelvan al aula de clases, aunque aun faltan siete municipios que reinicien las actividades.
Sin embargo, las familias japonesas han manifestado temor a la radiactividad y a las consecuencias que estas puedan ocasionar en sus hijos, motivo por el que se resisten en regresar a sus localidades y aseguran sentirse a gusto en las zonas que habitan desde el desastre.
Las autoridades alegan que el retorno es seguro porque fueron tomadas en cuenta y adoptadas todas las medidas pertinentes para el proceso de recuperación de los sectores. En los ayuntamientos se desarrollan estrategias para motivar a las familias y el Gobierno prometió cubrir los gastos escolares, incluido el transporte.
Especialistas consideran que el Gobierno nacional y las administraciones locales deben cumplir las expectativas de los estudiantes, para lograr el éxito en el nuevo año escolar. No obstante, se pudo conocer de la mano de un profesional de la educación que en un colegio sólo asistirán ocho estudiantes de ambas enseñanzas.
La nación japonesa declaró en 2011, el estado de emergencia nuclear en la central de Fukushima Uno, tras producirse un sismo de magnitud 9.0 que generó explosiones en los edificios donde se ubican los reactores nucleares, fallos en los sistemas de refrigeración, triple fusión del núcleo y liberación de radiación al exterior.
Este terremoto ha sido considerado el cuarto más potente del mundo y el peor ocurrido en el país asiático y trajo como consecuencia además, un tsunami con olas superiores a los 15 metros de altura causando la muerte de más de 15 mil personas y otras seis mil sufrieron lesione