El jueves pasado, en Antofagasta, los 25 representantes del Consejo de Rectores se reunieron con el jefe de la División de Educación Superior del Mineduc, Francisco Martínez, y el asesor de la reforma educacional, Rodrigo González. El encuentro tenía por objetivo aclarar las dudas existente sobre el sistema de financiamiento a las universidades.
Sin embargo, la propuesta terminó por decepcionar a los rectores de instituciones públicas. A grandes rasgos, el Mineduc señaló que se mantendrán los instrumentos de distribución de financiamiento, sin contemplar cambios estructurales en la forma en que las universidades del Cruch reciben sus ingresos, aunque ésta también ha sido una de las demandas del movimiento estudiantil.
En concreto, se mantiene el Aporte Fiscal Indirecto (AFI) y no se considera por ahora la idea de aumentar los aportes basales a las instituciones o de financiamiento directo según criterios como la productividad académica y eficacia en la docencia. A juicio de Marta Matamala, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago, este es un retroceso respecto a lo que se había conversado en reuniones anteriores.
«Nuestras exigencias van en la vía de eliminar el AFI, destinando los aportes fiscales directos a las instituciones que tienen que cumplir con ciertas características que las establezcan como públicas. Hoy nos preocupa y creemos que esto no sólo es una mala noticia para los rectores, sino para todos los que queremos transformaciones estructurales», recalcó.
A juicio de los dirigentes universitarios, este tipo de iniciativas demuestra que la reforma educacional está lejos de concretar los cambios exigidos, ya que se mantiene la competencia entre las instituciones. Camila Rojas, presidenta de la FECh es enfática: «Esta situación significa que no hay reforma. Que no se concretarán los cambios por los que nos hemos movilizado. Es necesario recordarle a las autoridades del gobierno que este sistema está en crisis y que este seguirá privilegiando a algunos en pos de otros. El problema es que son los estudiantes más pobres del país quienes seguirán recibiendo una mala educación».
Se le acabó el tiempo a la reforma educacional
Durante el próximo sábado 28 de mayo, anuncian los estudiantes, se realizará una nueva reunión del Confech en la Universidad Arcis de Santiago. En la instancia se discutirán este y otros anuncios de la reforma calificados como insuficientes por el mundo universitario, que cada vez ve alejarse aún más las propuestas de la reforma educacional de las exigencias manifestadas por el movimiento.
Así lo describe Carlos Vergara, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Valparaíso: «Llegando a la fecha donde se va a presentar la reforma, el gobierno demuestra que está muy lejos de los intereses del movimiento social. El gobierno fue anunciando diversas consignas bien tentadoras, como el caso de la gratuidad, pero al final vemos que no hay nada definido, ya llevamos cinco años defendiendo la demanda por un financiamiento distinto de la educación, alejado del mercado y la usura».
El escenario comienza a volverse oscuro para el Mineduc y el gobierno. Uno de sus proyectos más destacados comienza a venirse abajo ante la nula integración de los actores y demandas del movimiento y esta misma semana, el mundo secundario notificó en La Moneda que «comienza la ofensiva». La paciencia parece haberse agotado luego de varios meses de espera y en la próxima reunión del Confech podrían tomarse nuevas decisiones sobre el futuro de la movilización. Esta vez, desde la vereda de los universitarios.
Los dirigentes estudiantiles son claros en recalcar que hoy, la reforma educacional no cuenta con el respaldo del movimiento social. «Es una reforma que por supuesto no contaría con nuestro apoyo, ni con la representación de nuestras ideas dentro del papel y el proyecto de ley», consignó Matamala. A su juicio, no faltan espacios de negociación o diálogo, sino la disposición del gobierno de la Nueva Mayoría a integrar las propuestas de los actores de la educación.
El tiempo y la paciencia que el movimiento estudiantil le entregó a la reforma de Bachelet se ha agotado. Si en la semana, el aviso fue claro por parte del mundo secundario, este sábado 28 podría definirse el camino de los universitarios.
«Llamamos a los estudiantes de Chile a no esperar más que este gobierno nos entregue soluciones ni en reforma educacional, ni en reforma tributaria. Llamamos a las familias a comprender que este gobierno no nos va a regalar nada y que es tarea de todos conquistar nuestros derechos«, finaliza Carlos Vergara.