Película sobre la lucha por la sobreviviencia de la cultura mapuche se estrena en FicValdivia

Leonel Retamal

28/09/2012 11:13am

La película «DUNGUN, la lengua» es un documental dirigido por Pamela Pequeño y producido por Viviana Erpel y cuenta la historia de una escuela ubicada en una villa del Gran Santiago, donde la docente mapuche Elba Huinca trabaja por rescatar la lengua de su pueblo traspasándola a sus alumnos. En esta misión busca no sólo revalorar la identidad oculta en muchos de ellos, sino también, educar en el respeto a las diferencias y transmitir que cada origen aporta una mirada especial sobre el mundo.

La premier mundial de «DUNGUN, la lengua» será este martes 2 de octubre a las 21:30 horas en Cine Lord Cochrane de Valdivia. «Es la primera vez que exhibiremos el documental de forma pública, sin duda, es un momento muy importante enfrentar la película con sus espectadores, ver y sentir la resonancia que tiene en ellos. Nos interesa mucho que vaya gente local, de Valdivia y de la región a verla ya que se trata de la lucha por la sobreviviencia de una cultura que es parte de todos nosotros», afirma su directora Pamela Pequeño.

Elba Huinca es la docente mapuche, el timbre musical de su pronunciación envuelve a los niños despertando su imaginación a través de una naturaleza viva, mágica, parte integral de la cultura mapuche. Elba nació en Santiago pero siendo niña aprendió la lengua mapudungun y junto con ella absorbió la riqueza de la cultura de sus ancestros, y hoy son esos conocimientos lo que actualmente vierte a diario en sus clases transformándose en narradora y cuenta cuentos, atrapando así la atención de sus alumnos.

Para Pamela Pequeño, «Dungun, la lengua», «es una pequeña historia que ocurre en un colegio municipal de una villa popular de Santiago, que refleja como un espejo la diversidad cultural que vive hoy nuestro país. En la escuela conviven los inmigrantes del cono sur que llegan hoy a nuestro país junto con los hijos de familias de origen mapuche que viven en gran número en la comuna, todos aprendiendo de la cultura mapuche e interiorizando que en la continuidad de la lengua, el mapudungun, reside la sobrevivencia de una cultura tan fundamental como ignorada por nuestra nación, como la mapuche».

Y agrega: «me enteré por una nota de un diario de la existencia de la enseñanza intercultural bilingue en algunos colegios de Santiago, me llamó mucho la atención que en medio de la ciudad se enseñara el mapudungun a niños. Imaginé a una profesora mapuche en esa acción diaria de impartir sus conocimientos a sus alumnos. La vi hablando con una modulación perfecta casi como si cantara al hablar. Cuando entré al colegio Mustafá Kema Ataturk de la comuna de Lo Prado y conocí a Elba Huinca, supe que había encontrado a esa profesora que había imaginado en un inicio, lo que no tenía claro, es que iba a superar todas mis expectativas. Elba es una artista a cabalidad, es una docente nata, una gran narradora, canta, toca instrumentos, pinta, teje y tiene un carisma insuperable. Es como si hubiera nacido para esto».

Por medio de la película «queremos que además de conocer el trabajo de estas docentes excepcionales, encantarse con el carisma de las niñas y niños del curso, interiorizarse en el cotidiano de la sala de clases, los espectadores sientan orgullo de la cultura mapuche y de nuestra pertenencia a ella, Un pueblo histórico y actualmente en un conflicto agudo que ha sido ninguneado por el Estado y la nación chilena. A nuestro juicio, es tiempo de conocerlo, valorarlo y liberarnos de prejuicios anquilosados», sentencia Pamela Pequeño.

SOBRE EL RODAJE

El rodaje se realizó por un año consecutivo en el colegio Mustafá Kemal Ataturk de Lo Prado. «Seguimos el proceso de Elba enseñando mapudungun y la cultura mapuche en un curso de 1º básico que luego pasó a 2º básico durante todo ese ciclo temporal. La comunidad de profesores, padres y estudiantes nos acogieron con una calidez y una disposición abierta lo que hizo fluir nuestro trabajo sin problemas. Para mí y todo el equipo fue un gran aprendizaje de que iniciativas que dependen del esfuerzo y el compromiso de dos profesoras como Elba Huinca y Olga Márquez con el apoyo del resto de la comunidad, calan profundo en las vidas de estos niños que a diario aprenden que en la diversidad cultural reside la riqueza ignorada de nuestro pueblo y de toda Latinoamérica», recuerda Pequeño.