La lucha y la movilización del pueblo boliviano va a lograr que el expresidente Evo Morales, actualmente asilado en México, pueda regresar pronto a su país, dijo el embajador de Bolivia en Brasil, José Kinn.
«Creo que él puede regresar pronto; el despliegue de la lucha de nuestro pueblo va a crear condiciones para que él regrese pronto», expresó el diplomático.
Kinn consideró que todavía es «muy temprano» para determinar quién podría ser el próximo candidato del Movimiento al Socialismo (MAS) cuando se realicen nuevas elecciones en Bolivia.
De todas formas, aseguró que el partido va a participar de nuevos comicios. «Somos la principal fuerza política del país, no podemos no participar», expresó.
No obstante, dijo que su situación es distinta, y adelantó a que probablemente no continúe en su cargo y regrese a su país cuando las condiciones lo permitan.
«Hay un periodo de transición, con un Gobierno de transición (…) volvería a Bolivia en cuanto se calme la situación; hoy en día hay una persecución política a los compañeros del MAS, entonces no es recomendable (volver) en este momento; pero en cuanto las condiciones se calmen, yo retorno a Bolivia», dijo el embajador.
Por su parte, el senador del Partido de los Trabajadores (izquierda), Humberto Costa, dijo que para su agrupación es «necesario y fundamental» repudiar el «golpe de Estado» en Bolivia, al mismo tiempo que manifestar el apoyo a los bolivianos y a Evo Morales.
El legislador, uno de los varios que se hizo presente en la embajada boliviana, expresó además que es necesario visibilizar la «preocupación» por el mantenimiento de la democracia en América Latina.
Morales dimitió el pasado domingo en medio de violentas protestas y luego de que así se lo demandaran la policía y las Fuerzas Armadas.
Las protestas recrudecieron luego de que la misión electoral de la Organización de los Estados Americanos (OEA) detectara irregularidades en el escrutinio de los comicios del 20 de octubre y llamara a la realización de nuevas elecciones.
Rechazo al golpe
Kinn recibió en la sede diplomática en Brasil a decenas de dirigentes sociales y políticos de varios países de todo el mundo, que participaban en la capital brasileña del seminario internacional Brics de los Pueblos, que se realizó lunes y martes en esa ciudad.
Los participantes del seminario se desplazaron desde la Cámara de Diputados hasta la embajada boliviana para expresar su respaldo a Morales y su repudio al golpe de Estado.
Kinn saludó la «tan significativa» visita de dirigentes con quienes tiene «una causa común». «Sé que ustedes están sufriendo, junto con el pueblo boliviano todo ese golpe que el imperialismo y la reacción fascista en mi país han organizado», dijo el embajador en una improvisada conferencia de prensa.
Kinn lamentó que pese a «transformaciones muy profundas», que beneficiaron «a todos los sectores sociales» de Bolivia, los más conservadores alentaran un golpe de Estado contra Morales.
«A pesar de eso, el imperialismo y los sectores más reaccionarios, que nunca comprendieron, que nunca permitieron que el pueblo tenga el poder; nunca pudieron ni quisieron comprender que los sectores populares tenían derecho de gobernar su destino», aseguró el diplomático.
El embajador dijo que los sectores «radicales y ultraconservadores» del país hicieron «todo lo posible» para que cayera Morales desde 2006, cuando el líder indígena alcanzó la presidencia por primera vez.
Kinn expresó que estos grupos aprovecharon lo ocurrido en las elecciones para dar un golpe «que ya tenían planificado» desde los primeros años de Gobierno de Morales en Bolivia.
Morales renunció y llegó a México, cuyo Gobierno le concedió asilo político mientras en su país continuaban las protestas, con actos de violencia y vandalismo.
Cortesía de Sputnik