El llamado fue realizado desde la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech) con el fin de aliviar el bolsillo de las familias de los estudiantes mediante el congelamiento del pago de la matrícula por 6 meses, además de la creación de una propuesta para reducir los aranceles desde el Centro de Estudio de esa organización. Otra de las medidas es la postergación de clases por falta de cierre de semestres 2019 y por incapacidad logística de comenzar el semestre vía online.
En la misma línea, la Fech solicita la redistribución del presupuesto, aumentado a 50 mil pesos mensuales la tarjeta BAES-Junaeb, con posibilidad de adelantar el recibo de tres meses. Esto porque en el contexto actual de la pandemia por Coronavirus las universidades han reducido sus gastos considerablemente en el mantenimiento de casinos y servicios de alimentación interna.
La presidenta de la Fech, Emilia Schneider, informó que “esta semana desde la Fech vamos a hacer una votación llamando a los compañeros y compañeras a paralizar nuestras actividades, emplazando a nuestras autoridades y al Mineduc a que garanticen condiciones materiales mínimas para que todes los estudiantes podamos acceder a la educación en igualdad de condiciones en esta pandemia”.
Schneider agregó que “creemos firmemente que los costos que va tener esta pandemia por Coronavirus no los pueden cargar les estudiantes y sus familias. Es importante que nos hagamos cargo de lo que sucede en la educación”.
“Esta paralización la vamos a revalidar el 3 de abril y le damos ese plazo a las autoridades de nuestra universidad para que nos pongamos a trabajar y garanticemos las condiciones mínimas de acceso, que no precaricen la docencia y que permitan la igualdad de condiciones para les estudiantes de nuestra casa de estudios”, puntualizó la dirigenta.
Finalmente, la presidenta de la Fech reforzó: “Emplazamos al Ministerio de Educación a ponerse a trabajar y dejar de ser un ministerio negligente, displicente y ausente como ha sido hasta ahora y que se haga cargo de las distintas demandas que nosotras estamos trabajando desde el centro de estudios de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, dando un respaldo técnico a lo importante que es hoy en día congelar la matrícula por 6 meses por el impacto que va tener en los bolsillos de las familias esta pandemia, además, de aumentar beneficios estudiantiles y justamente a suspender las clases hasta que podamos garantizar estas condiciones mínimas».
En ese sentido, Schneider añadió que «hoy día el costo de la educación no lo pueden seguir cargando las familias y los estudiantes. El Consejo de Rectores, las organizaciones sociales, las instituciones de educación superior junto con el Mineduc, debemos trabajar en conjunto para salir adelante de esta pandemia”.
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