La Administración del presidente ruso, Vladímir Putin, desestimó las acusaciones del Gobierno del Reino Unido de supuesta desinformación sobre el coronavirus y las calificó de absurdas.
«Rechazamos con firmeza esas afirmaciones (…) Consideramos que esas acusaciones son absurdas», dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en una comparecencia ante la prensa.
Más temprano, el Ministerio de Exteriores británico afirmó que Moscú usó la pandemia de coronavirus en sus intereses, además acusó a Rusia, China e Irán de llevar a cabo una campaña de desinformación.
Peskov recalcó que «Rusia y China, por el contrario, abogan por la cooperación internacional en el desarrollo de vacunas y medicamentos contra el coronavirus».
El Reino Unido es uno de los países más golpeados en Europa por la crisis de COVID-19 con más de 300.000 contagios y más de 42.200 muertes.
El país monárquico superó a España e Italia por la cantidad de fallecimientos y contagios.
La oposición británica, liderada por Keir Starmer, ha cuestionado al primer ministro Boris Johnson por su gestión de la crisis y le instó a asumir la responsabilidad de sus fracasos en vez de tratar de culpar a otros.
Cortesía de Sputnik
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