Rita Segato en Caupolicanazo Feminista 2022: América Latina y el mundo miran a Chile y la primera constitución paritaria de la historia

El pasado sábado 27 de agosto se realizó por tercera vez en la historia chilena un Caupolicanazo Feminista, donde más de 30 organizaciones de mujeres y diversidades sexuales autoconvocadas, se reunieron en un evento artístico y cultural llando a votar Apruebo a la primera constitución paritaria del mundo.

Entre las invitadas se encontraron Bandita La Inquieta, la rapera Piedra del Alma y la ya histórica Ana Tijoux. Además de contar con la animación de las comediantes nacionales Fernanda Villavicencio y Natalia Valdebenito.

Sin embargo, una de las últimas invitadas en confirmar fue la Antropóloga feminista Rita Segato, quien con sus estudios de género, descolonización e interseccionalidades se ha convertido en una de las intelectuales de habla hispana más influyentes.

A pesar de que su llegada al histórico evento iba a ser inicialmente como espectadora, las organizadoras del evento la invitaron a leer una de sus reflexiones más recientes sobre el proceso democrático chileno que ha estado en la mira de todo el mundo.

A continuación, en El Ciudadano, te compartimos íntegramente el discurso y reflexiones de la literata argentina sobre nuestro contexto político, el rol de la mujer en la constitución paritaria y por sobre todo, como la prohibición del aborto es una violación de Estado contra el cuerpo de toda mujer.

“No tengo como agradecer porque es algo extraordinario no que acabo de ver, algo de altísima calidad, absolutamente un diamante fino, una cosa maravillosa este evento, muy agradecida por permitirme aprender.

Les cuento el cuento completo, donde sale que la prohibición del aborto es una violación. Una niña en Tucumán, una niña de 10 años fue violada por su abuelo, o del marido de su abuela y la niña en el momento en que llegaron, se embarazó y gritaba “sáquenme esto de adentro, sáquenme esto de adentro” y cuando escuché esa frase pensé “esto es lo mismo que dice una mujer violada”: sáquenme esto de adentro.

Entonces digo, la forma en la que le impidieron abortar, es igual que hacerla permanecer en una situación de violación, con un pedazo de carne que no quiere tener, de alguna manera.

Y yo dije, pero esta violación es la peor de todas las violaciones porque es una violación de Estado. Y eso es lo que hay que entender, la prohibición del aborto es una violación de Estado contra el cuerpo de toda mujer. El Estado nos tiene violadas cuando nos impide sacarnos esto de adentro.

Y mientras escuchaba, escribí un pequeño texto, les voy a pedir que me perdonen, es muy breve, y dice así:

 “El destino de esta Constitución grandiosa, texto guía no solo para Chile, sino para todas nosotras del continente, no termina bien o mal el día 4. Este texto sigue escrito, grabado a fuego, pensado, debatido e inscrito en el proyecto de América Latina para siempre.

Aquí la visión del mundo de las mujeres del continente ha sido inscrita y servirá de orientación por un largo tiempo. No existe un sujetO universal con sus defectivos y defectivas con sus minorías, aquel que dice las verdades de interés universal y que conduce los trabajos de la constitución y aquellas personas de interés particular, las mujeres, los indios, las personas racializadas. Esa estructura minorizadora debe caer.
Si existe una sujeta universal que representa los intereses y deseos de toda la humanidad, somos nosotras el sujeto político por excelencia. No una minoría, no un grupo de interés por sí mismo, de un interés parcial minoritario. Saquémonos eso de la cabeza para dar el próximo paso.
Y por eso a lo largo de los milenios han tratado de sujetarnos, invisibilizarnos y ensombrecernos. Conducirnos.

Porque somos nosotras quienes garantizan la vida y la sobrevivencia de los pueblos, las sujetas del arraigo, las que saben bien que es lo que se debe defender para sobrevivir.

Maternar es político y puedo decir también que maternar es LO político, y nos han dicho que no. Lo político por excelencia ha transitado por otro lugar, pero no, transita por ahí. Porque es lo único que garantiza la continuidad de los pueblos.

Es por eso que América Latina y el mundo miran a Chile y la primera constitución paritaria de la historia. Estoy aquí, escuchando y aprendiendo y pienso que este proceso no es solo chileno. Sino nuestro, del sólido entramado de mujeres de nuestro continente andino, amazónico, mesoamericano, que han puesto su corazón y sus esperanzas en este proceso constituyente.

Chile nos representa, las mujeres chilenas, dicho en plural, por su variedad por su multiplicidad de sus anhelos, de sus deseos, de sus intereses. Esas mujeres abren el camino y son la sujeta universal que habla de lo que puede salvar a la humanidad, toda ella, en este momento tan apocalíptico de la historia.”