La activista brasileña en Derechos Humanos, Sabrina Bittencourt, se suicidó la noche del sábado 2 de febrero en su casa ubicada en Barcelona, España. La información fue difundida a través de un comunicado emitido por la ONG Víctimas Unidas, en Brasil.
Bittencourt se dio a conocer por participar activamente en impulsar las denuncias por violación en contra del médium Joao de Deus (Juan de Dios, traducido del portugués).
La ONG detalló que la activista dejó una carta de despedida relatando las razones que le impulsaron a quitarse la vida. En la nota se disculpó «por no aguantar» y anunció que se uniría a Marielle Franco, una concejala de Río de Janeiro asesinada de varios disparos en 2018.
La mujer, de 38 años de edad, fue la primera en recopilar las denuncias en contra del religioso. Joao Teixeira de Faria, nombre real del médium, se encuentra en detención preventiva por la presunta violación de más de 200 mujeres.
Abusos en iglesia
En un artículo publicado en una revista brasileña, Bittencourt señaló que fue víctima de agresiones sexuales en la iglesia que frecuentaba.
Esta lamentable situación hizo que dedicara su vida al apoyo de las víctimas de abusos y a mostrar las verdaderas caras de varios líderes religiosos.
De esta manera, se convirtió en la primera en llevar a las autoridades brasileñas los testimonios de mujeres que presuntamente fueron atacadas sexualmente por Joao de Deus, las cuales no se limitan a Brasil, debido a que existen acusaciones en otros países.
Más denuncias
Bittercourt denunció hace unas semanas a Teixeira por la supuesta esclavización sexual de mujeres, a quienes las tiene en sus propiedades y las embaraza para luego vender los niños en el mercado negro internacional.
A través de una publicación en Facebook, Gabriel Baum, hijo de la activista fallecida, explicó que su madre “dejó todo con pruebas, organizado”, en contra del guía espiritual.
Agregó que Bittercourt «pasó todo el año preparándolo» e hizo «más de 300 videos con todas las instrucciones».
«Lo dejó todo con pruebas, organizado, hay un paquete de cartas. Ella no quería estar muerta ni por las bandas, ni por el cáncer», apuntó Baum.«Mi madre lo hizo para evitar que nos mataran», apuntó.
Joao de Deus, también conocido como el “curandero psíquico”, de 76 años de edad, se hizo famoso en Brasil por sus supuestos dotes curativos y “cirugías psíquicas”.
https://www.elciudadano.cl/latino-america/a-un-paso-de-la-carcel-un-medium-brasileno-por-200-denuncias-de-mujeres/12/13/
https://www.elciudadano.cl/china/reconocido-monje-budista-renuncia-tras-acusaciones-de-abuso-sexual/08/15/