Al menos 13 reclusos murieron y 145 se intoxicaron con una mezcla de medicamentos en la cárcel de Uribana, según el gobierno venezolano. Los prisioneros estaban en huelga de hambre y el miércoles comenzaron las protestas contra las condiciones miserables en la cárcel, la cual alberga cuatro veces más la población penal que permite su capacidad.
Según el Ministerio de Servicios Penitenciarios venezolano, los reclusos “asaltaron la farmacia y los talleres, procediendo a ingerir múltiples fármacos tales como: antibióticos, antihipertensivos, hipoglicemiantes, antiepilépticos, alcohol absoluto, entre otros”. La ONG el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) ha cuestionado la cifra de los muertos y la causa de la muerte.
En enero del año pasado 58 personas fallecieron en una protesta en la misma cárcel de Uribana. Según el OVP, 150 personas han muerto en cárceles a lo largo del país durante el primer semestre de este año. La mayoría de estas muertes se han producido por armas.
El Ciudadano