A 16 meses de la desaparición de 43 normalistas y el asesinato de seis personas, familiares, organizaciones sociales y ciudadanos, realizaron tres actividades para recordar que la exigencia de verdad y justicia sigue latente. La entrega de un oficio al Ministro presidente Luis María Aguilar Morales, de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) fue la primera acción, pasadas las 14 horas. En dicho documento los padres de familia de los 43 desaparecidos solicitaron que ¨las resoluciones que emitan los jueces de Distrito en el caso Ayotzinapa, sean apegadas a los principios de imparcialidad e independencia, procurando garantizar a las victimas el pleno acceso a la justicia¨.
La preocupación de los padres en las resoluciones del caso radican en que la defensa de los policías detenidos –acusados de los asesinatos y las desapariciones- han promovido amparos en contra de las órdenes de aprehensión por homicidio para lograr su libertad. El representante legal de los padres de familia, Vidulfo Rosales Sierra, manifestó que con el documento entregado buscan que el Ministro Luis Aguilar Morales tramite una reunión con los juzgados de Iguala, para informar cuál es el estado de los amparos, y también que el poder judicial tome en cuenta la gravedad de los hechos para su resolución.
De manera simultanea enfrente de las instalaciones de la Procuraduría General de la República (PGR) se realizó un mitin con el féretro que el cuerpo de Julio César Mondragón Fontes ocuparía después de su exhumación, sin embargo, han pasado tres meses de que el cuerpo del normalista asesinado y sometido a visibles muestras de tortura fuera sustraído de su tumba, a petición de sus familiares y su abogada Sayuri Herrera para realizar las pruebas de ADN y peritajes correspondientes por parte del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana y del Equipo Argentino de Antropología Forense, para determinar las causas de su muerte. El cuerpo se mantiene congelado en las instalaciones de la PGR.
Su viuda Marisa Mendoza señaló que dicho proceder es una muestra de la negligencia en la impartición y procuración de justicia en el asunto, y la prolongada espera responde a desgastar a la familia y la defensa, y así hacer tiempo para que se agote el mandato del GIEI (dicho mandato culmina el 30 de abril del 2016) y el caso de Julio quede a la deriva.
Entre las omisiones en el caso de Julio César, de acuerdo con su abogada Sayuri Herrera, se encuentran que la ropa del normalista no fue analizada como un elemento para esclarecer las condiciones y no hay un registro de que esta hubiera sido asegurada por las autoridades o bien devuelta a los familiares, y que no hay en el expediente del caso ningún registro respecto a que ocurrió con su globo ocular izquierdo que le fue arrancado del rostro a Julio César .
La tercera acción que clamó verdad y justicia a 16 meses del caso Iguala fue una marcha del Ángel de la Independencia a la SCJN. A la altura de la PGR el féretro que espera ser ocupado por el cuerpo de Julio César, se unió a la marcha. Flores blancas y fotografías del normalista asesinado hicieron presencia entre los manifestantes.
Padres de familia de los 43 desaparecidos y familiares de los asesinados encabezaron la marcha, secundada por estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, organizaciones sociales, sindicales y estudiantiles de diferentes escuelas de educación media y superior.
Pasadas las 19 horas la marcha arribó a la SCJN donde los padres realizaron un mitin y la familia de Julio César montó un altar con fotografías del estudiante, flores y el féretro. Los padres denunciaron el trato que recibieron al tratar de ingresar a la SCJN donde se les pidió dejar las mantas que tienen plasmado el rostro de sus hijos desaparecido. Hilda Hernández madre de César Manuel Gonzáles Hernández, uno de los 43 desaparecidos, expresó: ¨no podemos dejar nuestras lonas porque es parte de nuestra lucha, nos acompaña en cada acto de exigencia de verdad y justicia, no era ninguna arma para que nos impidieran el paso¨.
Bernardo Campos padre de José Ángel Campos Cantor, otro desaparecido, mencionó que han sido 16 meses de dolor, angustia y sufrimiento, pero ver que aún contamos con apoyo de la gente nos da fuerza para seguir y el amor de padres y la búsqueda de verdad y justicia nos mantiene de pie.
Por Alejandra Rodriguez
El Ciudadano