Un inusual operativo realizó la policía hace algunas noches en los locales céntricos de Iquique, en cada uno de ellos buscaban a Víctor Reyes, presidente de la coordinadora de las agrupaciones de subcontratistas de la Minera Collahuasi, y líder de la movilización que paralizó varios días a multinacional.
Al mejor estilo de los años de la dictadura se busca al dirigente ¿con qué objetivo? Es sabido que Víctor Reyes frecuenta varios locales nocturnos de la bohemia iquiqueña y que entre sus amistades están trabajadores, artistas y parroquianos, lo que constituye ningún pecado para una persona.
Lo que llama la atención, es que carabineros por dos noches consecutivas recorrió los locales céntricos de la ciudad preguntando por Reyes.
Afortunadamente el dirigente se ha mantenido realizando actividades personales y privadas.
La pelea de Reyes es que los subcontratados de Collahuasi, tengan las mismas garantías que los mineros de planta. Por ejemplo, éstos ejercen las mismas funciones de un empleado directo de la empresa, pero su sueldo es inferior, viven en malas condiciones y las raciones alimenticias son de mala calidad.
En el fondo, lo que buscan es un mejor equilibrio de condiciones laborales, al interior de una empresa que, gracias a la producción de sus trabajadores, gana casi 4 mil millones de dólares al año.
Otra cosa que llama la atención, es el silencio cómplice de los medios locales para cubrir la información de los hechos que originaron la represión del movimiento, por parte de la policía, que llegó al yacimiento en un avión Hércules de la Fach, con tanquetas, carros lanza gases y efectivos policiales.
Hasta el momento, ninguna autoridad se ha responsabilizado del magno operativo, desde la intendenta Luz Ebensperger y el gobernador de la Provincia del Tamarugal, Espártago Ferrari, han negado tener
participación en la “orden” de enviar a los policías al mineral ubicado a 4.000 metros de altura sobre el nivel del mar.
Hay que destacar que Espártago Ferrari, tiene intereses con la empresa Collahuasi, ya que arrienda un complejo deportivo ubicado en la ciudad de Iquique a la empresa minera. Y, aunque él lo niegue, un día antes
de ser nombrado gobernador por la provincia de El Tamarugal, distrito donde está el yacimiento, él administraba el centro recreacional, ubicado en la zona de Bajo Molle.
Al parecer, las prácticas de la dictadura están volviendo a aplicarse para reprimir a los trabajadores, más aun cuando, en forma inusual la policía uniformada rastrea los ratos libres del dirigente Víctor Reyes en los diferentes locales nocturnos de Iquique.
Fuente: www.elsoldeiquique.cl