Hay que decir que la Democracia Cristiana siempre se sale con la suya, vaya uno a saber por qué. El caso es que parlamentarios de dicho partido lograron introducir una serie de modificaciones al proyecto de despenalización del aborto en tres causales, que ayer se aprobó en la Cámara de Diputados. Sin embargo, es la sociedad organizada la que se planta y les «da cara».
Hoy conversamos con Anita Román, en representación del Colegio de Matronas y afirmó que sus miembros no van a cometer la crueldad de denunciar a sus pacientes que se hayan practicado un aborto -provocado o no- a razón de una violación y que prefieren ir a la cárcel antes de criminalizar a las víctimas:
«Puede que no sea la mejor salud, pero Chile tiene la característica de tener un servicio de salud que llega a todas las personas y que en términos de seguridad sanitaria, es valorable. Chile tiene, en relación al Producto interno bruto, la menor tasa de mortalidad materna, yo diría que del mundo, porque tenemos indicadores de país desarrollado y eso da cuenta de políticas sanitarias en las que la población confía y una de las cosas en las que ha confiado siempre la población es precisamente, en el secreto profesional, entonces, en esa indicación que hoy día se ha puesto, donde hay que denunciar a la mujer que efectivamente está con una situación de aborto, provocado o no, con el sólo hecho de pensar que puede ir a la cárcel, obviamente no va a acudir en busca de ayuda a los centros asistenciales.»
Anita Román, presidenta del gremio, agregó que no denunciarán a las mujeres que -voluntariamente o no- se practiquen abortos ya que el rol de la matronería es salvar la vida y no mandar mujeres a la cárcel.
«La indicación que puso la Democracia Cristiana que es muy peligrosa para la salud pública, porque hoy día nosotras tenemos una población que confía en su servicio de salud. Y con esta situación se está criminalizando doblemente a las víctimas y va depender de la subjetividad del profesional si la situación de aborto es voluntario o no. En ese espacio, yo creo que es muy peligrosa esta indicación y nosotros creemos que como matronas, nuestro deber es solucionar el problema de salud de la paciente y no mandarla a la cárcel. Por eso es que mi postura y, con esto, creo representar a gran parte del gremio, prefiero y preferimos ir a la cárcel ya que de acuerdo a lo que nosotros juramos al momento de egresar, tenemos que proteger el secreto de confidencialidad y ese espacio de confidencialidad nosotros lo tenemos que cuidar y si tenemos que ir a la cárcel por cumplir esa promesa y proteger el secreto profesional, lo vamos a hacer y seremos los primeros en ir a la cárcel.»
Tomando en cuenta que el colegio de matronas y matrones se encuentra en esta posición, obviamente le preguntamos sobre su percepción sobre los médicos gineco-obstetras y su compromiso con el secreto profesional, pensando en que el deber de la denuncia entonces puede recaer en ellos, pero señaló que en base a sus 32 años de experiencia en el rubro, todo el equipo médico involucrado en el área de salud sexual y reproductiva, ha estado siempre al servicio de salvar el riesgo vital. Y eso siempre pasa por respetar el secreto profesional.
«Yo tiendo a pensar que conozco a las mujeres de este país y que viven este trance y muchas de ellas, con este sistema de penalización total, llegan a los hospitales cuando ya se encuentran en riesgo vital, que son cinco de las que se mueren al año ya que se dejan estar y son capaces de arriesgar su vida por miedo. Por esta razón, yo hago un llamado a la población para que tengan confianza ya que nosotros al menos, desde la matronería, nosotros NO vamos a denunciar.»
El martes 15 de marzo, la Sala de la Cámara va a sesionar para analizar esta iniciativa que podría votarse el día miércoles.
Sin embargo cabe decir que si hay denuncia, se está criminalizando también a la víctima de violación y con ello, se pueden tomar medidas persecutorias para las mujeres que se encuentran en esta condición de vulnerabilidad, cuando lo que se pretende es dejar de criminalizar a la mujer por ser violada y que la indicación de la Democracia Cristiana no debiera ser considerada ya que el proyecto de aborto en 3 causales pretende otorgar un derecho, el cual debe ser garantizado por el Estado en las condiciones más óptimas para que todo esto no sea un saludo a la bandera o un gesto de «buena crianza». Se agradece entonces que, desde el colegio de matronas se den este tipo de señales para aumentar la confianza en las mujeres que necesitan de una atención médica oportuna y de forma digna cuando han pasado por un evento tan dramático como lo es una vulneración sexual.