Este domingo un joven mapuche de 17 años, identificado como Brandon Hernández Huentecol, resultó gravemente herido tras recibir por la espalda una bala de escopeta de un funcionario de Carabineros. Ahora se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Alemana de Temuco , en donde ha sido intervenido quirúrgicamente y permanece con riesgo vital.
El hecho ocurrió en la ruta R-49, camino a la localidad de Curaco, en la comuna de Collipulli, provincia de Malleco, en el contexto de un “control preventivo de identidad”. En ese marco se inició una discusión, debido a que Carabineros -además de accionar de forma violenta desde un comienzo, según testigos-, trató de realizarle también dicho procedimiento a un niño de 13 años, algo que esta fuera de la nueva ley, al que redujeron poniéndolo contra el suelo, comenzando éste a gritar para pedir auxilio. En ese instante intervino Brandon Hernández con el objeto de prestarle ayuda a su hermano, quien también había sido violentamente detenido por los uniformados. Hernández es igualmente reducido, momento en que recibe un disparo en su espalda, ante lo cual un grupo de personas presentes reaccionan lanzándole piedras a los policías.
El Subprefecto de Malleco, Juan Pablo Espinoza, aseguró a Radio Bío Bío que lo ocurrido fue accidental, señalando que “mientras realizaban el control, por razones que se investigan, el arma antimotines se disparó y el impacto lo recibió el joven que solo estaba en las cercanías del lugar“. Junto con ello, descartó que el sargento segundo responsable del hecho haya sido dado de baja.
Como Catrileo y Mendoza Collío
Lo ocurrido con Brandon Hernández Huentecol trae a la memoria lo sucedido hace 8 años con el joven comunero mapuche, Matías Catrileo (22), quien el 3 de enero de 2008 fue asesinado de un disparo en la espalda realizado también por un funcionario de Carabineros, el cabo 2° Walter Ramírez.
Catrileo fue alcanzado por uno de los proyectiles de la metralleta del uniformado en momentos en que éste le disparó a un grupo de comuneros que realizaban una toma en el fundo “Santa Margarita”, en la comuna de Vilcún, propiedad del agricultor Jorge Luchsinger Villiger.
Sin embargo, Matías Catrileo no ha sido el único mapuche asesinado por la espalda por un agente del Estado en medio del conflicto chileno-mapuche. El 12 de agosto de 2009 Jaime Mendoza Collío resultó muerto luego de recibir un impacto de bala proveniente del arma del cabo de Carabineros Patricio Jara Muñoz. Al igual que Catrileo, el hecho se produjo en el marco de una ocupación territorial, esta vez del Fundo Santa Alicia.
Daniel Labbé Yáñez