Al menos 30 personas fueron detenidas este lunes tras una protesta que se realizó en las puertas de la catedral de Concepción, en favor de los cuatro comuneros mapuche que se encuentran en huelga de hambre desde hace 110 días.
Los manifestantes habían levantado un campamento y desplegado varios lienzos a la entrada del templo en solidaridad con los hermanos Benito, Pablo y Ariel Trangol, y Alfredo Tralcal, que se encuentran en delicado estado de salud.
El arzobispo de Concepción, Fernando Chomalí, aseguró a los periodistas que no pidió el desalojo, ni de las personas que estaban en el interior de la catedral como tampoco de los que protestaban en el exterior, pese a que impedían el paso de los feligreses. Sin embargo, Fuerzas Especiales de Carabineros irrumpió en el lugar lanzando agua y gas lacrimógeno, y detuvo a unas 30 personas.
Los cuatro comuneros, que suman en la prisión 110 días en huelga de hambre, acusados de incendiar un templo evangélico en el sur de Chile, fueron trasladados el pasado miércoles a un hospital tras agravarse su salud. La Fiscalía los investiga por su presunta responsabilidad en el ataque incendiario ocurrido en junio de 2016, acusándolos por la ley Antiterrorista.
El estado de salud de Tralcal es el de mayor preocupación, pues se le detectó una hemorragia digestiva, además de la pérdida de peso. Hasta ahora, el Gobierno rechazó las demandas del grupo al estimar que, por la gravedad de los hechos, sería una «pésima señal» retirar la querella por ley Antiterrorista, señaló a los periodistas el intendente en funciones de La Araucanía, Ricardo Chancerel.
Durante esta jornada, la policía chilena también arrestó a Víctor Queipul, lonko de una comunidad mapuche en la región de La Araucanía, quien mantenía una orden de detención pendiente desde agosto pasado por no presentarse a una audiencia de imputación por la supuesta agresión a un policía en diciembre de 2016.
La Justicia acusa a Queipul, dirigente de la denominada Comunidad Autónoma Temuicuicui, en la que residen alrededor de 120 familias mapuches, de golpear a un miembro de la Policía de Investigaciones mientras era arrestado el año pasado, debido a otra orden de detención que tenía pendiente desde 2015.
En La Araucanía, una de las regiones más pobres de Chile, los mapuche ocupan 600.000 hectáreas, que equivalen a un 5 % de las tierras heredadas de sus familiares, y una sexta parte de lo que poseen las compañías forestales.
(Foto: Soy Concepción)