La mañana de este miércoles consejeros del Colegio de Abogados, encabezados por Paulina Vodanovic, junto a representantes de los movimientos Todas y todos y Acción Migrante (MAM), entregaron una carta dirigida a la Intendenta de la Región Metropolitana, Karla Rubilar, en la que solicitan prohibir la marcha anti inmigrantes que se realizará este domingo 11 de agosto en Santiago y otras ciudades del resto de Chile.
De acuerdo a lo declarado por Vodanovic, el objetivo de la acción es que «no se autorice la marcha convocada por un movimiento que claramente incita al odio, tiene expresiones xenofóbicas e incluso llama a asistir armados».
Respecto de esto último, cabe recordar que a través de posteos y videos subidos a sus redes sociales, el líder del movimiento Capitalismo Revolucionario, Sebastián Izquierdo, ha convocado a los interesados en ser parte de la manifestación racista a llevar armas para «protegerse».
El también consejero del Colegio de Abogados, Álvaro Fuentealba, destacó que Chile ha suscrito compromisos internacionales como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, el que -dijo- «es claro en señalar que el Estado parte debe prohibir toda incitación al odio racial, étnico, religioso, de cualquier naturaleza».
Por otra parte, recordó que la Constitución «garantiza el derecho a reunión pacífica y sin armas, y esta gente está llamando a marchar armados, algo que no tiene precedentes». «No puede ser autorizado. Cualquier cosa que se autorice en ese sentido, viola el estado de derecho», añadió el jurista.
Junto con ello advirtió que este escenario ha sido «provocado por el propio Gobierno», aludiendo Fuentealba a «las declaraciones del ministro de Hacienda (Felipe Larraín) diciendo que la cesantía era por culpa de los migrantes, y las del ex ministro de Salud (Emilio Santelices) diciendo que el VIH había aumentado por los migrantes».
En ese sentido, el abogado añadió que «esa irresponsabilidad es lo que provoca un ambiente del cual todos podemos salir desfavorecidos».
«Este es un país que se hace con inmigrantes; el futuro de Chile depende de la integración de todas las personas que quieran venir a esta parte a trabajar dignamente», concluyó Fuentealba.