Este miércoles, el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia, con sede en La Haya, suspendió la lectura de sentencia contra Slobodan Praljak (72), exgeneral del ejército en la autoproclamada República Croata de Herzeg-Bosnia, luego de que este bebiera veneno en plena audiencia. De acuerdo a la televisión croata, el ex militar murió a los minutos del hecho.
Mientras se realizaba la lectura de sentencia, Praljak gritó: “¡No soy un criminal de guerra!”, tras lo cual bebió el contenido de un pequeño vaso. Su abogada ha dicho que se trató de veneno.
La situación provocó confusión y miradas desconcertantes de parte de los partícipes de la audiencia. Carmel Agius, presente de la sala, ordenó que se corrieran las cortinas del banquillo de los acusados y la misteriosa bebida fuera llevada al laboratorio para su análisis. El tribunal, con sede en La Haya, llamó a una ambulancia.
En 2013, Praljak fue condenado a 20 años de cárcel por crímenes de guerra perpetrados contra musulmanes bosnios. Junto a él, fueron condenados otros cinco políticos o militares bosniocroatas, todos declarados partícipes de una asociación criminal responsable de una limpieza étnica.