Criminal de la dictadura que debiera estar en Punta Peuco lleva más de un año en el Hospital Militar: está condenado por dos homicidios

Desde hace más de un año -391 días exactamente- permanece internado en el Hospital Militar el general (r) del Ejército, Héctor Orozco, ex director de la DINE (Dirección de Inteligencia del Ejército) y ex director de Televisión Nacional.

La información fue proporcionada por los propios familiares de los criminales de lesa humanidad a través del Facebook La voz de Punta Peuco, dando cuenta de una situación al menos inusual. Condenado a 10 años y un día por dos homicidios calificados ocurridos en San Felipe en 1973, Héctor Orozco debería encontrarse actualmente cumpliendo su condena en Punta Peuco. Sin embargo, hace casi 400 días lo hace en el Hospital Militar, un recinto preparado para recibir en las mejores condiciones a sus pacientes.

Orozco, hermano de René -el famoso médico que por años fue presidente del Club Deportivo Universidad de Chile- ingresó al penal el 21 de agosto de 2017, a la edad de 89 años. Esa mañana, acudió en bata y zapatillas a cumplir la sentencia emitida por la Corte de Apelaciones de Valparaíso.

Se le imputan dos homicidios calificados, el de Rigoberto Achú Liendo y Absolón Wegner Millar, ocurridos el 13 de diciembre de 1973 en la Región de Valparaíso, quienes fueron sacados del lugar de reclusión -la Cárcel de San Felipe- para ser llevados ante la Fiscalía. Según la investigación, ambos hombres fueron acribillados por la patrulla que los transportaba cuando eran trasladados de vuelta al penal.

El 5 de julio de 2018 –menos de un año después de haber ingresado a cumplir su condena- su nieta y abogada, Alejandra Sepúlveda, solicitó oficialmente el indulto presidencial para su abuelo. En esa oportunidad se acogían a dos informes médicos, uno de una clínica particular y otro del Hospital Militar, que señalaban que Orozco padecía un tipo de Alzheimer.

Sin embargo, el Servicio Médico Legal (SML) emitió un informe en el que se confirmaba que el ex director de Inteligencia del Ejército podría seguir cumpliendo su condena, puesto que, según lo descrito en el documento, “el evaluado no presenta una enajenación mental o grado de enfermedad mental que le impida cumplir de forma efectiva la sanción impuesta por la sentencia”.

Nueve meses después, Orozco ingresó al Hospital Militar por un diagnóstico desconocido. No ha salido del recinto de salud desde entonces.