El pueblo de Panimavida, ubicado en la región del Maule, ha sido autodenominado por los vecinos como una “tierra sin dios ni ley”, dado que acusan amenazas y procesos judiciales unilaterales, impulsados por el dueño del complejo turístico Termas de Panimavida, el empresario Roberto Movillo.
Luego de hacer pública la orden de desalojo que afectaba a María Bravo, para el pasado miércoles 26 de mayo, la senadora de la séptima región, Ximena Rincón y su abogada asesora Ana María Williams, comenzaron una investigación que logró la suspensión de manera indefinida de esta orden. Sin embargo, al no ser esta una solución definitiva, los vecinos decidieron llevar este caso a la más alta esfera de gobierno.
Con fecha 28 de mayo, familiares de María Bravo y a nombre de los vecinos del sector, llegaron hasta La Moneda para hacer entrega de una carta al presidente de la República, Sebastián Piñera.
En dicho documento se informa acerca de la amenaza de ser echados a la calle, por resolución de un proceso legal poco transparente. Por lo que demandan, de parte del Gobierno, una investigación que aclare el proceso en el que Movillo se habría adueñado de tan amplia fracción del pueblo, y la intervención de la Contraloría General a la localidad.
En la carta, se solicita también que se detengan los desalojos hasta que una investigación determine cuáles son las propiedades de este empresario y si el Banco Estado está tras este abuso colectivo, a través de expropiaciones por deudas del empresario.
La respuesta por parte del gobierno debe ser dada en un plazo de 15 días hábiles; por su parte el grupo de trabajo de Ximena Rincón continuará con la investigación.
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Por Victoria Lozano
Fotografía: Pamela Sepulveda -hija de María Bravo- hace entrega de la carta en La Moneda.
El Ciudadano