Carabineros detuvo este miércoles al dueño del fundo El Refugio (Itropulli, Paillaco), el alemán Broder Redlefsen, y a cinco de sus trabajadores tras el ataque perpetrado contra la comunidad mapuche Román Millapán, cuyos integrantes se encuentran en proceso de recuperación territorial, con posesión del título de merced que establece la pertenencia legal del terreno.
RBB recoge el relato de Verónica Henríquez, vocera de la comunidad, quien señaló que el incidente se registró en la tarde de ayer, cuando un grupo de trabajadores ingresó al fundo ‘El Refugio’ rompiendo una cerca con maquinaria pesada y procediendo a bloquear el tránsito en los caminos internos. Según se indicó desde la fiscalía, además dejaron caer unos bolones sobre un puente de madera, el cual fue destruido.
Además, en el centro de Paillaco, mientras Redlefsen se encontraba al interior de la subcomisaría, encapuchados, presuntamente también trabajadores del fundo, fueron arrestados tras amenazar de muerte e intentar agredir con palos a una integrante de la comunidad, los cuales fueron defendidos por ciudadanos de Paillaco.
Luego de esto la policía implementó un operativo de búsqueda de la camioneta, que fue encontrada con palos, herramientas y un saco con piedras. Bajo el asiento trasero, Carabineros halló un gorro pasamontañas y otros elementos contundentes.
Reincidentes
El pasado 9 de noviembre -un día después de que el diario El Mercurio publicara que la sede diplomática de Alemania en Santiago se había dirigido al Gobierno chileno para solicitar «protección para los alemanes y sus propiedades”- un grupo de encapuchados presuntamente contratados por Redlefsen atacó violentamente a las familias afectadas, golpeando a los comuneros, causando destrozos en siembras, un puente y arrojando excremento de animales con mangueras al interior de unas viviendas.
“Éste es un matonaje contratado por el señor Broder Redlefsen; llegaron siete camionetas con encapuchados que nos amenazaron con palos y armas, y por querer defendernos, dos de nuestros hombres resultaron heridos”, señaló entonces al diariofutrono.cl Verónica Henríquez.
Producto de estos hechos la Intendencia presentó una querella y se ordenaron medidas cautelares a favor de las comunidades, que implicaban que los trabajadores y el dueño del fundo no podrían acercarse al lugar, norma que fue violada ayer y que propició el arresto de los ahora imputados por los delitos de amenazas y daños, que se espera pasen este jueves a disposición judicial.
Pero aunque fue la primera vez que dos hombres resultan con lesiones visibles, la comunidad denuncia que lleva sufriendo amenazas, daños en sus cultivos, cercos, viviendas y agresiones físicas menores durante los últimos dos años.
Henríquez también aprovechó de aclarar que los comuneros se encuentran en ese lugar porque existe un título de merced. “Han pasado casi dos años y no nos han podido sacar de aquí, porque no tienen cómo justificar la propiedad de las tierras. Hemos sufrido amenazas y daños durante todo este tiempo y al parecer, la justicia espera que haya una muerte para hacer algo”, manifestó.