Día Internacional del Migrante: la situación en Chile

Los movimientos migratorios a gran escala han crecido mucho en los últimos años. Actualmente, alrededor de 150 millones de personas viven y trabajan fuera de sus países de origen. España, de donde no hace mucho tiempo salían migrantes hacia Europa del Norte y América, se ha convertido, hoy en día en un país receptor para un gran numero de personas migrantes. En Chile, desde 1990 se presenta un constante aumento de inmigración, especialmente económica, la cual se ve regulada por una legislación migratoria que data de 1975 y que carece de políticas públicas de acceso a servicios u otros derechos de la población migrante.

Entre las personas migrantes encontramos trabajadores y trabajadoras migrantes, población refugiada, demandantes de asilo, e inmigrantes permanentes. Las razones que tienen para abandonar su país de origen son muy distintas y cambian de una persona a otra. Sin embargo, podemos identificar una serie de circunstancias que llevan a la gente a abandonar su hogar y buscar un mejor futuro en otro lugar.

La exclusión social y económica, la atracción que ejercen los países más desarrollados, la necesidad que tienen esos países de contar con la migración, los conflictos armados internos y los desastres naturales, todas ellas son causas que provocan migración.

DIFICULTADES Y RETOS

Nunca es fácil abandonar nuestro país de origen, nuestro hogar, nuestra gente; pero, aun lo es menos cuando encontramos dificultades en el país receptor a causa de nuestras diferencias de idioma, costumbres y cultura, así como dificultades económicas y sociales. Y por si esto fuera poco, a todo ello se añaden las cada vez más habituales manifestaciones de racismo, xenofobia y otras formas de discriminación y trato inhumano y degradante hacia la población inmigrante.

La proclamación del día 18 de diciembre como Día Internacional de la población migrante se debe entre otros al creciente número de migrantes que existe en el mundo y a la preocupación internacional por asegurar su protección y el respeto de sus derechos y libertades fundamentales.

Según la Declaración Universal de los Derechos Humanos, todos los seres humanos nacemos libres e iguales en dignidad y derechos, y toda persona disfruta de los derechos y libertades proclamados en ella, sin distinción de ningún tipo, en particular de raza, color u origen nacional. Con la celebración de este día, se pretende además reconocer y valorar la enorme contribución de todas estas personas en el avance económico, social y cultural de los países en todo el mundo.

LA SITUACIÓN DE LOS MIGRANTES EN CHILE

La migración en Chile no es un hecho reciente, pues si bien en dictadura (1973- 1989) la característica fue de un país expulsor, el panorama anterior presentaba oleadas de inmigración especialmente europea, las cuales además contaban con la aprobación y colaboración del Estado chileno.

Ahora bien, desde 1990 se presenta un constante aumento de inmigración, especialmente económica, la cual se ve regulada por una legislación migratoria que data de 1975 y que carece de políticas públicas de acceso a servicios u otros derechos de la población migrante. Caracteriza a esta migración tanto el aspecto económico como la procedencia, siendo mayoritariamente de los países andinos, especialmente de Perú.

Cabe destacar que el estado chileno ha ratificado distintos instrumentos internacionales que tienen relación con los derechos de los trabajadores migratorios y sus familias, así como de otros más específicos referentes a trata y tráfico de personas, pero la implementación en el ordenamiento jurídico interno ha sido deficiente.

La carencia de una legislación y políticas públicas que comprendan el tema migratorio, no sólo presenta impacto en la vulneración de derechos migratorios, sino que también en lo relativo a derechos humanos consagrados tanto por la Constitución chilena, como por instrumentos internacionales, de esta forma los antecedentes relacionados a la imposibilidad de acceso a servicios prestados por el Estado a inmigrantes es latente en áreas de salud, educación, trabajo, acceso a la justicia y otros servicios. Esta discriminación de carácter estatal se transfiere hacia la sociedad civil, por la falencia de políticas que contravengan la discriminación.

Fuentes: www.enredate.org/www.amnistia.cl

NOTA EDITORIAL

El Ciudadano saluda a las diferentes comunidades de inmigrantes que viven en Chile y les ofrece tribuna para sus diversas manifestaciones culturales, especialmente a nuestros hermanos de América Latina, habitantes de la Patria Grande, pueblos de Abya Yala, ciudadanos de esta inmensa y rica Nación Latinoamericana.

Un datito: aprenda a preparar la deliciosa comida peruana