La dictadura militar brasileña (1964-1985) dio un apoyo financiero y diplomático de altísimo nivel al régimen del dictador Augusto Pinochet en Chile, gobierno al que defendió en los foros internacionales luego del golpe contra Salvador Allende, revelaron documentos inéditos de la cancillería de Brasilia.
Los documentos también dejan en evidencia la coordinación de las dictaduras para intercambiar datos sobre chilenos y brasileños que escapaban de los regímenes, en un capítulo del Plan Cóndor, la estrategia común de las dictaduras suramericanas.
Uno de los cables dice que Pinochet, en una cena ofrecida al embajador brasileño Antonio Cándido da Cámara Canto, dijo que Brasil y Chile estaban «comprometidos con la lucha intransigente contra el comunismo en el mundo».
Tomado de Argenpress