España: Vecinos de Tunte protestan por el resguardo de migrantes en recinto escolar

Los vecinos de la localidad grancanaria de Tunte se han opuesto al alojamiento de un grupo migrantes en un antiguo centro escolar de la población, en el que pasarán la cuarentena obligatoria de 14 días. Ante su llegada, el pueblo ha montado barricadas.

Veraneantes de todo el mundo disfrutan del sol y el mar en Maspalomas, uno de los principales centros turísticos del archipiélago canario. Tierra adentro, en Tunte, capital del municipio de San Bartolomé de Tirajana, al que pertenece Maspalomas, los vecinos montaban barricadas.

Contenedores, basura, restos de poda y ramas ocupaban la calle que da acceso a una antigua residencia escolar de la localidad grancanaria. A su alrededor, cerca de un centenar de personas bloqueaban el tráfico. Su objetivo era impedir la llegada de los 71 migrantes subsaharianos que arribaron el sábado 1 de agosto a la isla en patera y que hasta la fecha dormían en las carpas de la Cruz de Roja del muelle de Arguineguín. Allí esperaban a la asignación de un lugar de acogida donde pasar la cuarentena obligatoria por el coronavirus.

La negativa de los vecinos de Tunte viene de la supuesta presencia de casos positivos entre los migrantes. Información presente en la convocatoria de la protesta y que el alcalde en funciones, Samuel Henríquez, también ha difundido en un comunicado, en el que se refiere a los arribados en patera como «12 inmigrantes sospechosos de COVID-19». Datos que desmiente la Delegación del Gobierno en Canarias que remarca que ninguna de las personas trasladadas a Tunte ha dado positivo en las pruebas PCR a las que han sido sometidos en estos días.

La concentración y las barricadas se han mantenido durante toda la tarde. Los lugareños han impedido durante horas la entrada. Tras los contenedores, los vecinos han coreado lemas como «No nos moverán» o «el pueblo unido jamás será vencido». Según recoge el diario Canarias Ahora, algún manifestante decía que «hay que intentar que no se bajen de la guagua».

Protesta en la que no ha habido que lamentar incidentes graves, más allá de un joven que fue esposado durante una hora, aunque no fue trasladado a comisaría. Al final, la Policía Nacional se ha abierto paso entre las barricadas y ha conseguido alojar en el centro a 28 de los migrantes que llegaron el sábado pasado a Gran Canaria. A las 23:00, los asistentes se han dispersado.

Una protesta que ha generado toda serie de comentarios en redes sociales.

En estos momentos, los 28 migrantes se encuentran en el centro escolar, custodiado por la Policía Nacional. En esta ubicación se alojaban otras 80 personas que habían llegado previamente a Gran Canaria en patera. Precisamente, el alcalde de San Bartolomé de Tirajana ha criticado la decisión por la intención de desalojar a los anteriores residentes, además de por no haber sido consultado por la Delegación del Gobierno en la comunidad autónoma. «Se habían integrado en el pueblo y participaban de sus actividades».

«Este nivel de integración ha costado meses, no ha sido fácil para nadie, pero, por fin, se habían convertido en unos vecinos más, estamos hablando de personas que buscan una nueva vida e integrarse. En Tunte lo hemos conseguido, no entendemos esta decisión», explica Henríquez.

Momento en el que el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, pide al líder del ejecutivo nacional, Pedro Sánchez, un mayor control a las cuarentenas de migrantes. Torres considera que el protocolo de acogida de pateras no debería recaer solo en las comunidades autónomas. La cabeza política del archipiélago reclama la «cogestión» para habilitar espacios del Ministerio de Defensa o pisos de la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) para alojar en cuarentena a aquellos arribados que se encuentren en mejores condiciones y no requieran atención hospitalaria.

Cortesía de Sputnik

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