Alrededor de las cinco de la tarde, el cuerpo de Nelson Quichillao llegó a la ciudad de La Serena, luego de que sus restos salieran de Diego de Almagro, entre bocinazos y aplausos, en una camioneta del Servicio Médico Legal, para ser velado por amigos y familiares en la ex estación de ferrocarriles que se encuentra frente a la Plaza Pedro de Valdivia. Su lamentable deceso se produjo mientras protestaba en el campamento minero, en la región de Atacama.
A pesar de que la mayoría de sus familiares son de Coquimbo, se tomó esta decisión a razón del espacio, ya que esta nueva instalación dispuesta tiene capacidad para albergar una mayor cantidad de personas, considerando las circunstancias repudiables de su fatal desenlace, razón por la que han asistido, además de sus cercanos, diversos dirigentes sindicales vinculados al sector de la minería.
El campamento minero El Salvador ha sido señero en el marco de la paralización de los trabajadores contratistas ya que, a pesar de la represión y amenazas que han recibido de forma constante, han sabido enfrentar estoicamente sus circunstancias, decididos a conseguir lo que exigen sus demandas.
Para el director nacional de la Confederación de Trabajadores del Cobre, Consejero CUT, Edward Gallardo Basay y militante de Alternativa Obrera, es una situación inaceptable. El dirigente señaló para La Izquierda Diario que el Gobierno es responsable, porque reprime y no entrega nada a los trabajadores, señalando que “legislan en contra de los profesores con la carrera docente, reprimen a los trabajadores contratistas del metro, reprimen a los estudiantes, a los mapuches y ahora asesinan a un trabajador por movilizarse en el Chile heredado de la dictadura pinochetista. Esto es responsabilidad de este gobierno patronal, esto no puede seguir pasando.”
Mañana, el funeral de Nelson Quichillao se llevará a cabo en el Cementerio Parque de Recuerdo de Coquimbo. Se espera que en el lugar, se hagan presentes las autoridades del Gobierno para despedir los restos del contratista. Luego de esta ceremonia, los hermanos del fallecido han indicado que decidirán las acciones legales que se establecerán en contra de los responsables de los hechos.
Es lamentable que se repita la historia de Rodrigo Cisternas y que los trabajadores de Chile tengan un nuevo mártir, en un país en donde se necesita un diálogo real en el que las demandas, que son justas, sean escuchadas.