Este martes 12 de abril, el ministro en visita extraordinaria para causas por violaciones a los derechos humanos de la Corte de Apelaciones de Santiago, Mario Carroza, encabezó una reconstitución de escena en la investigación por el caso “Caravana de la Muerte”, específicamente por el ilícito perpetrado en octubre de 1973 en el ex regimiento Arica de La Serena, en el que fueron ejecutadas 15 personas.
La diligencia se efectuó en el regimiento de infantería N°21 de Coquimbo y se prolongó por 3 horas, durante las cuales el ministro interrogó en calidad de inculpados a 9 militares en retiro, entre ellos al ex comandante en jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre. Además, estuvieron presentes dos civiles como testigos. Al momento de llevarse a cabo este crimen, Cheyre era teniente y ayudante del comandante del regimiento Arica, Ariosto Lapostol.
El abogado querellante en el caso «Caravana de la Muerte», Cristián Cruz, explica que los delitos que se le imputan a Cheyre y que están en la querella son «homicidio calificado, obviamente el más relevante; secuestro calificado, porque las víctimas no fueron llevadas al regimiento (Arica) por la Caravana 5 minutos antes, sino que estaban a disposición de manera ilegal, torturados, por la gente del regimiento, por la gente responsable; y también la asociación ilícita».
«Para nosotros está absolutamente clara su participación, su responsabilidad, hay una de las personas que lo reconoce como aquel que con lista en mano retira desde una dependencia del recinto a las personas que posteriormente son ejecutadas», señala Cruz, agregando: «Y no estamos hablando de unos días antes, de una semana antes, sino que en la misma jornada, y con el inequívoco fin ciertamente de que sean ejecutadas».
Respecto al supuesto juicio de guerra que se habría realizado a estos prisioneros, el abogado es categórico: «No hubo ningún juicio de guerra». «Juan Emilio Cheyre participa de manera anterior, coetánea y a posterior, y de los hechos, haciendo creer en el famoso bando que sí hubo un consejo de guerra. No hubo tal, no», sostiene.
Docente y director
Sin embargo, la calidad de inculpado en el crimen de los 15 presos políticos en La Serena no ha sido un impedimento para que Cheyre continúe ejerciendo como profesor adjunto en la Pontificia Universidad Católica de Chile. Como pudo confirmar El Ciudadano, se desempeña hoy como docente de Derecho Internacional Público en la Facultad de Derecho de esa casa de estudios.
Pero, además, el ex Comandante en Jefe del Ejército mantiene su calidad de director del Centro de Estudios Internacionales de la UC (CEIUC), instancia que en su visión menciona como uno de sus objetivos «fomentar la paz, seguridad, progreso y solidaridad entre las naciones».
A principios de noviembre de 2015, un grupo de víctimas de la «Caravana de la Muerte» en La Serena llegó hasta la casa central de la Universidad Católica, donde entregaron al rector Ignacio Sánchez una carta para exponer su rechazo a la permanencia de Cheyre en el plantel educativo y su exigencia de que fuera removido, lo que hasta hoy no ha ocurrido.
“No sabemos cuáles fueron las referencias y méritos para contratarle en esta casa de estudios superiores, no es sano y nos ofende, que a nuestros jóvenes se les haga creer que el Sr. Cheyre es un virtuoso y modelo a seguir, como si el vestir hoy de profesor universitario lo eximiese de la responsabilidad, en especial la social, por los crímenes contra nuestros familiares”, se leía en la misiva.
Por Daniel Labbé Yáñez