Invisibles nunca más: expertas analizan violencia vicaria en Universidad Ibero

La violencia vicaria es una expresión de crueldad en la que madres, hijas e hijos sufren las principales consecuencias; en ella, las madres son deliberadamente privadas del contacto con sus hijas e hijos por parte de sus exparejas, como una forma deliberada para provocarles dolor y angustia.

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Así se explicó durante el conversatorio «Violencia Vicaria: una violencia invisible en México», celebrado hoy 27 de febrero de 11.00 a 13.00 h, en el Salón B206, de la Universidad Iberoamericana Campus Puebla, bajo el auspicio del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría, SJ.

Según se detalló durante la conferencia, este crimen ha comenzado a ser nombrado recientemente, y en 2023 se aprobaron reformas para incluirlo en el Código Penal Federal, la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y el Código Civil Federal. Sin embargo, estos avances no son suficientes, y los motivos fueron ampliamente desglosados por las expertas que intervinieron en el conversatorio.

Luz Arredondo, representante del Frente Nacional contra Violencia Vicaria (FNCVV), y Cristina Tovar, abogada y sobreviviente de este delito, profundizaron en sus impactos.

Por su parte, Rosario Arrambide González, directora del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría, SJ (IDHIE), señaló que esta violencia ha sido invisibilizada, a pesar del aumento de feminicidios cometidos por parejas sentimentales, donde en 2023, 6 de cada 10 agresores fueron parejas de las víctimas.

A su vez, Cristina Tovar explicó que en Puebla se habla de violencia «estatal vicaria» debido a la omisión, indiferencia o colusión de las instituciones competentes, lo que implica que ocurre a nombre del Estado o con su consentimiento. La abogada enfatizó el carácter multifactorial de la problemática que afecta a las madres mexicanas y a sus hijos.

Por su parte, Luz Arredondo, también conocida como «Mamá Tomate«, compartió su dolorosa experiencia personal de este crimen.

A pesar de ser abogada, Arredondo explicó que no supo cómo actuar cuando el padre de su hijo le dijo que no lo vería más. En el FNCVV, se ha identificado que a 9 de cada 10 mujeres les han negado la violencia porque es su papá, y salen sin una denuncia en las manos, a pesar de que se trata de sustracción de menores. Esta experiencia llevó a Arredondo a compartir su historia para evitar que otras mujeres e infancias pasen por lo mismo.

La necesidad de hablar sobre la violencia vicaria también se refleja en cifras: 10 de cada 10 mujeres han vivido violencia psicológica dentro de la violencia vicaria; 7 de cada 10, económica; 6 de cada 10, patrimonial; 5 de cada 10, física; y 4 de cada 10, sexual.

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