En Pakistán dos aviones no tripulados estadounidenses mataron el lunes a por lo menos 21 personas en Waziristán del Sur. Un total de 344 personas han muerto por ataques de drones en lo que va del año. Sólo en Pakistán, el año 2010 murieron 957 personas por similares incursiones.
Al menos 26 personas murieron el día 27 en el segundo ataque aéreo del día lanzado por aviones teledirigidos de Estados Unidos contra el área tribal de Waziristán Sur, en el noroeste de Pakistán, informó el canal de televisión local urdu, Geo.
En el primer ataque, emprendido el día 27 por la tarde, cuatro misiles fueron lanzados por los aviones teledirigidos contra un vehículo sospechoso de transportar militantes en el área de Wana, en Waziritstán Sur, y causó la muerte de 12 personas, según informes.
El segundo ataque, emprendido el día 27 por la noche en el área de Mantoi en Waziristán Sur fue dirigido contra dos casas y dejó 14 personas muertas.
El ataque del día 27 es el número 39 de su tipo emprendido por los aviones teledirigidos estadounidenses en territorio de Pakistán en lo que va del año. Hasta la fecha, un total de 344 personas han muerto en tales ataques en el 2011.
ENSAYANDO TECNOLOGÍA
Un estudio realizado en abril de este año calcula que los ataques con aviones no tripulados (drones) estadounidenses mataron a 957 personas en Pakistán el año 2010.
Se estima que el 2010 ha sido el año más letal en el uso por Washington de vehículos aéreos sin tripulación para realizar asesinatos selectivos y ha dejado graves “daños colaterales”, como son llamadas las muertes de civiles.
Pakistán y Afganistán son usados actualmente por el Ejército de Estados Unidos como un terreno de experimentación para sus aviones sin piloto, lo que les permite afinar esta nueva arma producida por el complejo militar-industrial de EEUU.
El primer vehículo aéreo “cazador-asesino” sin tripulación, el Predator, fue utilizado por el Pentágono en Bosnia en 1995 y después en los 78 días de la guerra aérea contra Yugoslavia en 1999, según comenta el periodista Rick Rozoff.
Si bien fueron diseñados originalmente para vigilancia, los norteamericanos desde el 2001 los han empleado para identificar y matar objetivos humanos.
Ese año los Predator fueron equipados con misiles Hellfire (fuego del infierno) y partieron desde Pakistán y Uzbekistán para lanzar ataques dentro de Afganistán. El año siguiente salieron de la base militar de EE.UU. en Camp Lemonnier en Djibouti con el mismo fin en Yemen, reporta Rozoff.
Xinhua – El Ciudadano
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