La tarde del 10 de septiembre de 2020, cerca de las 14:00 horas, unos quince funcionarios de la PDI llegaron en tres vehículos institucionales a la casa de doña Grisel Ñancul Fritz y doña Nora Fritz Ñancul, ubicado en el lof Likancura, sector Bajo Maica, de la comuna de Colipulli. Estaban presentes sus hijos, C.M.Ñ. de 14 años y F.A.F. de 13 años, así como la conviviente de su hermano, Laura Vaca Pardo, junto a dos lactantes.
Los policías ingresaron violentamente a la propiedad sin dar motivos del allanamiento, y sin provocación alguna, amenazaron y apuntaron con armas de fuego a las mujeres y a sus cuatro hijos, obligándolas a tirarse al suelo.
Ante la oposición de las agricultoras y dueñas de casa, quienes preguntaban por el motivo de tal violencia, los funcionarios policiales procedieron a detener a doña Grisel Ñancul Fritz y a doña Nora Fritz Ñancul, obligándolas a permanecer con sus rostros contra el suelo, que tenía abundantes pozas de lluvia, inmovilizándolas con las rodillas en sus espaldas y cuello, lo que les impidió respirar: «Me están asfixiando, me están asfixiando», gritó Nora a los funcionarios, siendo ignorada.
Ante dicha situación, los adolescentes intentaron defender a sus madres, producto de lo cual fueron amenazadas con armas de fuego y golpeados. C.M.Ñ. fue detenido y aplastado en el suelo con la fuerza de un robusto funcionario policial. El adolescente se quejó y señaló que no podía respirar.
El operativo fue registrado con el celular de Laura y el menor violentado, sin embargo, sólo el primer video pudo ser presentado como prueba porque el segundo equipo fue incautado por la PDI. Mientras Laura grababa, fue golpeada, botada al suelo y obligada a apagar la cámara (Revisar video acá). Producto de los golpes, se le diagnosticó gran equimosis e induración de 25 cm. por 15 cm. y claudicación de marcha por dolor.
Pese a ser detenidas, tanto Grisel Ñancul como su hijo C.A.M.Ñ. no fueron llevados a constatar lesiones ni se les dio lectura de sus derechos, debiendo asistir a un centro de salud por sus propios medios. Ya en horas de la tarde, fueron liberados Grisel Ñancul Fritz y su hijo C.M.Ñ., en tanto Nora Fritz fue obligada a permanecer detenida esposada a una silla durante toda la noche. Al día siguiente, fue imputada bajo los cargos de maltrato de obra a funcionarios de la PDI.
Sólo una vez que se encontraban detenidas en el cuartel policial de Angol, fueron informadas de la existencia de una orden de detención en contra de Ismael Ñancul Fritz, hermano y esposo de las querelladas.
Sebastián Saavedra, abogado querellante y presidente de Cidsur, señaló que «nos encontramos en una situación de suyo grave, donde funcionarios policiales entrenados para estas situaciones han usado la fuerza de forma desproporcionada, en contra de mujeres y niños, en particular en contra de un niño de tan solo 14 años que ha resultado seriamente lesionado».
El abogado detalló que la constatación del adolescente diagnosticó tres escoriaciones laterales en la zona periocular izquierda, una escoriación en su frente y leve aumento, dolor y sangrado en su nariz, equimosis lineal en su cuello, equimosis en tórax anterior derecho, seis equimosis en zona dorsal, una escoriación en su palma derecha, tres escoriaciones en su palma izquierda, erosión en su rodilla derecha y dolor en ambas rodillas. Al presentar la querella, volvió a sangrar por la nariz.
Saavedra detalló que las penas correspondientes irían de cinco años y un día a 10 años por el delito de torturas y tres años y un día, a 5 años por el delito de apremios. Por estos motivos presentaron la querella por delito criminal esperando que se investigue y se sancione lo antes posible a los responsables, según lo descrito por el artículo 150 A del Código Penal.
Persecución política a liderezas
No es primera vez que esta familia es allanada y violentada por las fuerzas policiales del Estado. Para el abogado, «los ataques se dan porque se trata de dos mujeres liderezas importantes de las comunidades mapuche de Malleco en resistencia. Lamentablemente la forma que se ha visto últimamente en la represión de parte de carabineros y funcionarios de la PDI es actuar con una fuerza desproporcionada».
«Ya no existe siquiera respeto a la condición de niño o niña de mis representados, lo cual pudimos observar todxs en los videos del adolescente empujado por funcionarios de Carabineros en el puente Pío Nono en Santiago. En este caso, se trata de una respuesta institucional ante un reclamo ancestral y político que se manifiesta en las familias y directamente en las liderezas Fritz Ñancul», puntualizó Saavedra.
Recordemos que el 2015, Nora Fritz Ñancul fue baleada en ambas piernas por funcionarios de Carabineros, frente a su hijo de 12 años, agresión por la que estuvo diez días hospitalizada (Ver noticia Cidsur).
Marcha contra la violencia hacia la infancia mapuche
Una semana después de estos hechos, el 16 de septiembre en Temuco se realizó la marcha «Basta de Violencia Contra lxs Niñxs Mapuche» convocada por las comunidades en resistencia de Malleco, la cual fue violentamente reprimida por Carabineros de Fuerzas Especiales, resultando 22 detenidos, entre ellos Brandon Hernandez Huentecol, baleado por el sargento Cristian Rivera, el año 2016, a los 17 años de edad, y nuevamente, el menor C.M.Ñ., hecho último por el cual Cidsur presentará una querella durante los próximos días, en esta ocasión, contra funcionarios de Carabineros de Chile.