El grupo llegó hasta la corte de apelaciones solicitando indagar sobre la revelación de Dagoberto Palacios -publicada con fecha 18 de agosto de este año por El Ciudadano- en donde señaló que el fallecido general Javier Palacios Ruhmann (su tío), le confesó que había sido él quien le disparó con un tiro de gracia a Salvador Allende el 11 de Septiembre. Esta confesión la habría realizado en el año 1977. El general Palacios, fue el responsable de la toma del Palacio de La Moneda el día del Golpe de Estado.
La causa fue llevada por Mario Carroza, quien sobreseyó la investigación luego de la ratificación del suicidio, luego de los peritajes realizados por peritos nacionales y extranjeros.
Esta sentencia quedó ejecutoriada en el mes de enero de este año, cuando la Sala Penal de la Corte Suprema cerró definitivamente el caso.
En esta oportunidad, la Corte de Apelaciones de Santiago, atendiendo a lo resuelto por el alto tribunal, negó la reapertura, arguyendo lo siguiente:
“Lo pretendido por la apelante es renovar o proseguir la investigación por las razones que estima de tal entidad plausibles; pero que acceder a ello, supone reiniciar un proceso terminado, esto es, finalizado o concluido, infringiendo las normas legales citadas, vigentes y obviamente de aplicación obligatorias en estos procesos, por lo que deberá desestimarse su medio de impugnación”.
Sin embargo, Celedón, abogado representante de la agrupación, anunció que insistirá en la necesidad de investigar la presunta intervención de terceros en la muerte del ex presidente.
La versión que exponen los integrantes de la agrupación de ex Prisioneros Políticos, el general Palacios junto a sus hombres protagonizaron un enfrentamiento con Allende y los GAP. En este acontecimiento, el presidente Allende habría resultado herido y gracias a eso, tuvieron los militares la oportunidad de armar un montaje en donde lo habían llevado al salón independencia, donde Palacios se habría encargado de darle un tiro de gracia. (Táctica utilizada ampliamente durante la dictadura, como por ejemplo, en el caso de Rinconada de Maipú, entre otros).
Según la versión de la agrupación de ex Prisioneros Políticos, este alto uniformado y sus hombres protagonizaron un enfrentamiento con Allende y los GAP, donde cayó herido el mandatario. Ahí habrían elaborado un montaje: trasladaron al presidente al salón Independencia, donde Palacios le habría dado el “tiro de gracia”.