La ONU alertó que se prevé que más de 1.800.000 personas necesiten asistencia alimentaria en 2022.
El representante especial del secretario general para Mali de la Organización de Naciones Unidas (ONU), El-Ghassim Wane, indicó este martes que la inseguridad en el país, lejos de suprimirse, se ha agravado.
“La inseguridad se ha expandido, la situación humanitaria se ha deteriorado, más niños no van a la escuela, y el país se ha visto afectado por un ciclo interminable de inestabilidad”, precisó el funcionario.
La ONU alertó que se prevé que más de 1.800.000 personas necesiten asistencia alimentaria en 2022 frente a los 1.300.000 millones de 2021, lo que representa el mayor nivel de inseguridad alimentaria registrado en Mali desde 2014.
El futuro del país está en peligro, valoró el designado El-Ghassim Wane, debido a que más de medio millón de infantes se han visto afectados por el cierre de escuelas.
El representante especial también informó sobre el enfrentamiento actual entre la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (Cedeao) y los líderes de transición de Malí, controlados por los militares.
“Un estancamiento prolongado hará mucho más difícil encontrar una salida consensuada, al tiempo que aumentará las dificultades para la población y debilitará aún más la capacidad del Estado”, dijo el delegado de la ONU.
El pasado 3 de diciembre, 32 civiles, incluidos 26 mujeres y niños, murieron cerca de Songho cuando atacaron un autobús. Según el organismo internacional, el número de Personas Internamente Desplazadas (PDI) aumentó de 216.000 a más de 400.000.
Fuente teleSUR
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