U. de Chile pide conformar una Comisión de Verdad y Reparación ante abusos a los DD.HH. de menores bajo custodia del Estado

A través de una declaración pública, la Cátedra de Derechos Humanos de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile pidió la conformación de una Comisión de Verdad y Reparación sobre niños, niñas y adolescentes bajo custodia del Sename, como una forma de que la sociedad en su conjunto, y el Estado […]

U. de Chile pide conformar una Comisión de Verdad y Reparación ante abusos a los DD.HH. de menores bajo custodia del Estado

Autor: Felipe Menares

A través de una declaración pública, la Cátedra de Derechos Humanos de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile pidió la conformación de una Comisión de Verdad y Reparación sobre niños, niñas y adolescentes bajo custodia del Sename, como una forma de que la sociedad en su conjunto, y el Estado de Chile en particular, aclare lo sucedido desde un punto de vista histórico determinando responsabilidades, se definan medidas para reparar a los afectados, y se transforme la realidad para que hechos similares no se repitan.

Esto luego de que el mismo Sename confirmara el año pasado la muerte de 1313 menores entre los años 2005 y 2016 mientras se encontraban bajo protección del Estado, ya sea en el sistema de residencias, en programas ambulatorios, procesos de la justicia penal juvenil o cumpliendo condenas.

«La historia reciente de nuestro país ha demostrado la utilidad de constituir una comisión especial, independiente y representativa que elabore un informe sobre el tema y proponga medidas que deba adoptar el Estado en distintos niveles», asegura la declaración, que cita como ejemplos la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación, la Comisión Nacional sobre Prisión Política y Tortura, y la Comisión Verdad Histórica y Nuevo Trato con los Pueblos Indígenas.

Finalmente, la Cátedra de DD.HH. declaró estar a disposición de la Presidenta Michelle Bachelet para conformar la comisión, «una medida necesaria y urgente para comenzar a enfrentar este tema con seriedad, y sentido de país», en virtud de la obligación que tiene el Estado de respetar y garantizar sin discriminación, los derechos de todos los individuos sujetos a su jurisdicción, siendo más intensa esta responsabilidad en el caso de aquellos menores bajo custodia de su institucionalidad.

El coordinador del organismo, Claudio Nash, aseguró que «durante décadas hemos sido incapaces de ver las graves violaciones a los Derechos Humanos que sufren los menores en custodia del Estado. Esto no es algo nuevo, no comenzó ahora, pero no lo hemos podido asumir como lo que es, la violación sistemática de los derechos de un sector clave de la sociedad como es la infancia».

Es por ello que junto a las medidas propuestas, Nash explicó que se debe impulsar un cambio cultural que permita transformar el paradigma bajo el cual se ve la infancia, adoptando las propuestas de la Convención de Derechos del Niño. «Los niños, niñas y adolescentes no son objetos que el Estado o las familias puedan disponer de ellos, son seres humanos con plenos derechos titulares de protección especial. Tiene que haber un cambio cultural que comprenda ese hecho fundamental», afirmó.

Violaciones a los Derechos Humanos

El académico también enfatizó en que los abusos sufridos por los menores bajo custodia del Sename configuran un caso de violaciones a los DD.HH. «Cuando hablamos de afectación al derecho a la vida, al derecho a la integridad personal, al derecho a su libertad personal y al derecho de proyectos de vida de nuestros niños, niñas y adolescentes, y esas afectaciones son provocadas por acciones, negligencias u omisiones del Estado, hablamos de violación a los Derechos Humanos. En ese sentido, el punto de vista del gobierno a través de su ministro de Justicia es un error, y lo único que busca es eximir al Estado y a este gobierno de responsabilidad», afirmó.

En la misma línea, el académico aseguró que es importante comprender que los DD.HH. son una temática actual en el país, y no algo que se encuentra limitado a los casos de violaciones masivas y sistemáticas a los mismos durante la dictadura militar, donde existía una política pública que los producía. «Es evidente que la situación es distinta hoy, pero lo que cambia es la naturaleza de la violación, no su existencia misma».


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