La banda de rock irlandesa U2 canceló el concierto que tenía previsto dar este sábado en San Luis -estado de Misuri- ante las crecientes protestas que están teniendo lugar en esa ciudad, alegando que no pueden poner en peligro la seguridad de sus seguidores: «El Departamento de Policía de San Luis nos ha informado de que no están en condiciones de proporcionar la protección estándar para nuestro público como se esperaría para un evento de este tamaño», dijo la banda en un comunicado.
«A la luz de esta información, no podemos, en buena conciencia, arriesgar la seguridad de nuestros fans y continuar con el concierto de esta noche, por mucho que lamentamos tener que cancelar, sentimos que es el único curso de acción aceptable en el entorno actual» continuó el grupo.
Quienes compraron entradas para el evento a través de internet, recibirán un reembolso de las mismas, mientras que aquellos que las compraron en persona podrán reclamar su dinero a partir de este lunes en los lugares donde las adquirieron.
Las protestas en San Luis se originaron luego de la decisión de un tribunal de Misuri, de absolver de asesinato en primer grado al ex policía Jason Stockley, que en 2011 mató a un joven afroamericano, lo que calentó los ánimos en una ciudad que ya tiene varios otros casos de violencia policial.
El juez consideró a Sotckley no culpable de los cargos de los que se le acusaba y en el veredicto dictaminó que la muerte a tiros del joven Anthony Lamar Smith se debió a su «conducta peligrosa», en su escape de los uniformados.
Antes, en 2014, en un suburbio de San Luis -Ferguson-, se inició una ola de disturbios raciales que posteriormente se extendió a todo el país, luego de que un policía blanco mató al joven afroamericano Michael Brown, convertido en símbolo del movimiento «Black Lives Matter».
Según medios locales, ya hay varias personas detenidas y las fuerzas de seguridad han utilizado gases lacrimógenos para intentar dispersar los disturbios.