Algunos se tapan los ojos, otros agachan la cabeza avergonzados, la mayoría están atónitos. Estos soldados alemanes fueron obligados después de la guerra a visionar unas imágenes de los campos de concentración.
Esta foto la ponemos porque aún hay gente en Chile que dice que en el río Mapocho no flotaron cadáveres; que los desaparecidos están en Argentina y que Prais beneficia a puros sinvergüenzas.
Actualmente se están sacando muchas publicaciones que establecen memoria, sin embargo faltan instancias formales reales, como políticas estatales o institucionales de Fuerzas Armadas para que se haga un repaso por nuestra propia historia.
Tanto víctimas como victimarios se están muriendo sin que exista justicia.
Si nos gusta tanto parecernos a los países europeos; sería bueno replicar también instancias como estas.