La Comunidad Mapuche Autónoma Temucuicui, mediante su Werken Jaime Huenchullán Cayul, informa a la opinión pública nacional e internacional lo siguiente:
1.- El día de hoy, viernes 26 de junio, nuestro Werken Jaime Huenchullán Cayul entregó una carta solicitando entrevistarse con la Presidenta de la República Michelle Bachelet o en su efecto el Ministro del Interior, para manifestarles nuestra molestia ante la actual situación de represión que viven las comunidades Mapuche, nuestras demandas territoriales como Pueblo Nación Mapuche y el perseguimiento de los Mapuche que están en la Prisión Política en las cárceles del sur del país.
La reunión tiene por objetivo expresar nuestro repudio además a la judicialización de las demandas y reivindicaciones de nuestro Pueblo, las que han sido criminalizadas bajo la aplicación de la Ley Antiterrorista y la Ley de Seguridad del Estado, sin si quiera comprobar la real culpabilidad de Comuneros Mapuche en los hechos.
Nuestro Werken viene saliendo de la Prisión Política tras realizarse un juicio plagado de vicios, los que pese a todo lo manipulado por los carceleros, nunca pudieron concretar el montaje judicial, ratificándose la inocencia de nuestro Peñi y que la prisión política hacia los Mapuche existe en Chile. Además, él quiere públicamente emplazar al estado chileno y sus funcionarios, ya que no deben cuestionar los fallos de la justicia y que cesen de calumniar y encarcelar a quienes dignamente luchan por nuestros legítimos derechos.
En el año 2004, los Urban nos acusaron junto a otros comuneros de amenaza y daño y tuvimos que sufrir violentos y brutales allanamientos, represión y hostigamiento, junto con el asedio de colocar a 200 metros de la comunidad un retén de carabineros. A fines de ese año, sufrí un atentado contra mi vida, recibiendo dos tiros disparados por un grupo paramilitar financiado por los particulares de la zona. Estuve inconsciente y fui encontrado al día siguiente, siendo trasladado por mi familia en estado de gravedad al hospital de Victoria, quedando hospitalizado por varias semanas. De ese atropello, aún conservo en mi cuerpo más de cuarenta perdigones.
A comienzo del año 2005, nuevamente me acusaron de hechos que jamás cometí, y por lo que estuve siete meses en la cárcel de Angol, y después 3 meses con arresto domiciliario y después me sobrecedieron la causa, dejando sin efecto la medida cautelar.
En el año 2006, nuevamente nos persiguieron acusándonos de un incendio, atentado contra la autoridad donde hubo mucha represión, maltrato y violencia en contra mí familia y mis hijos. Eso el fiscal lo sabe perfectamente.
El año 2007 estuve nuevamente preso varios meses en la cárcel de Victoria, por las mismas causas, quedando absuelto.
El año pasado estuve muy enfermo, casi me muero, producto de una pancreatitis por lo que me vi en la obligación de ir al hospital siendo detenido y operado de urgencia en Temuco, donde quedé hospitalizado debido a la gravedad de la enfermedad, siendo esposado a la camilla y engrillado, y posteriormente trasladado a la cárcel de Angol en estas condiciones quedando ocho meses detenido. Todas estas imputaciones demuestran la clara persecución que existe en contra nuestra, ya que en el último juicio, pese a todos los intentos del fiscal Velásquez en inculparme y conseguir condena, fui nuevamente absuelto, demostrándose una vez más mi inocencia ante las falsas acusaciones de Urban. Así lo han comprobado los tribunales, y es por esto que exigimos ser escuchados, ya que a René Urban se le recibe en la casa de gobierno y en el congreso, siendo que está demostrado que miente, y emplazamos que se haga lo mismo con nosotros, ya que está manifestado que somos inocentes de los cargos y que nosotros decimos la verdad.
Son casi 6 años de continua represión, persecución, encarcelamiento, y hostigamiento permanente en contra de nuestra gente, todo esto por que hemos reivindicado derechos territoriales y políticos, y por que el gobierno no tiene la voluntad política para solucionar nuestras demandas y sólo criminaliza y judicializa las reclamaciones y movilizaciones del Pueblo Mapuche.
Me mantuve en clandestinidad, al igual que muchos hermanos perseguidos por el estado chileno, ya que estar bajo esta situación se hace insostenible, principalmente cuando uno tiene familia que alimentar y no puede pasar tanto tiempo con los procesos estancados en los tribunales e injustificadamente preso siendo que saben que uno es inocente. Más aún, cuando entendemos que somos perseguidos, no por ser delincuentes sino que simplemente por el hecho de ser Mapuche y reivindicar nuestros derechos. Nunca se pensó en nuestra inocencia, sino que se nos encarcela bajo miserables excusas que lo único que pretenden es que depongamos nuestra lucha, lo que jamás haremos ya que sabemos que es justa.
Nosotros siempre hemos estado abiertos al diálogo, y no es primera vez que nos dirigimos a las autoridades del estado chileno. Sin embargo, la constante respuesta de excluirnos y jamás respondernos o escucharnos nos hace sentir al margen de la institucionalidad, más aún cuando nunca se nos recibe en estas instancias, sino que se agudiza la persecución, la violencia y el terrorismo de estado.
En mi calidad de Werken de la Comunidad Autónoma Temucuicui, es que me hago presente, no de forma indirecta, sino que en persona para emplazar al gobierno que cese la hostilidad hacia nuestro Pueblo, ya que somos una nación originaria que sigue viva, y que seguirá luchando por lo que le fue robado. Y en circunstancias en que estuve injustamente encarcelado, siendo esto comprobado por los tribunales de justicia chilenos.
Por todo lo antes mencionado, es que consideramos y exigimos una vez más que se nos escuche, en una reunió urgente y extraordinaria con la Presidenta de la República, ya que es ella quién debe atender en persona estos vitales asuntos para su gobierno y el país.
Jaime Huenchullán Cayul
Werken de la Comunidad Autónoma Temucuicui