«Y verás cómo quieren en Chile»: 58% de los migrantes ha percibido «agresión directa»

Según cifras gubernamentales, en nuestro país hay poco más de un millón de migrantes, la mayoría proveniente de países latinoamericanos, quienes representan un 5,5% de nuestra población.

Según el octavo Informe del Centro Nacional de Estudios Migratorios de la Universidad de Talca Inmigración y discriminación en Chile, que recoge la opinión de inmigrantes de la Región Metropolitana sobre los problemas que enfrentan, se evidencian «resultados preocupantes sobre el trato que reciben». De acuerdo al estudio, el 57,6% ha percibido «agresión directa».

El 67% ha tenido dificultades con el acceso a la vivienda. Un 82% dice haber «escuchado chistes sobre extranjeros». El 64,7% ha presenciado «comentarios desagradables por ser inmigrante». El 63,7% siente que «ha sido visto con desprecio por pertenecer a otro país». El 50,7% dice que ha sido «insultado» y el 27,3% piensa que chilenos «no han querido sentarse junto a ellos en el transporte público». El 40% respondió que ha sentido que «no le han dado el trato que se merece en una institución privada» y un 41,2% dice que «en las instituciones públicas no lo han atendido como al resto».

Foto: Roberto Muñoz

Según el estudio, «los chilenos ven la inmigración como una amenaza económica y laboral». De hecho, el 57,6% de los migrantes piensan que «es en el trabajo donde tienen las mayores probabilidades de encontrarse con situaciones de discriminación y xenofobia».

Medardo Aguirre, director del centro de estudios de la Universidad de Talca, suma que además “ha habido una suerte de abuso en la oferta de arriendo», algo que se traduce -dice- en que «cuando son extranjeros, se les cobran precios mayores”.

«Los migrantes no son una amenaza”

Con la finalidad de contrarrestar esta errada sensación respecto de quienes llegan de otros países al nuestro, Medardo Aguirre señala que «los migrantes no son una amenaza”, argumentando que actualmente “desempeñan tareas que los chilenos están dejando de hacer».

El académico añade que «la discriminación tiene un componente socioeconómico muy importante», apuntando a que esta se lleva a cabo «hacia cierta inmigración latinoamericana y caribeña». Al respecto, estudios del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) sostienen que los chilenos estamos convencidos de que «somos más desarrollados» y que ellos «no serán un aporte para el país”.

“La sociedad chilena se ha ido convirtiendo en una sociedad discriminadora y de alguna manera con algunas facetas un poco racistas”, concluye Aguirre.