Como parte de la cooperación y los acuerdos comerciales entre Teherán y Caracas, la noche de este sábado arribó a Venezuela el primero de cinco tanqueros iraníes cargados de combustible para surtir al país caribeño, que padece de desabastecimiento de gasolina, producto de las ilegales medidas coercitiva impuestas por Estados Unidos (EE.UU.).
Así lo confirmó la Embajada de la nación persa en Venezuela, a través de un mensaje publicado en su cuenta oficial en Twitter.
A su vez, el vicepresidente económico de Venezuela, Tareck el Aissami, dio este sábado la bienvenida a la embarcación iraní cargada de combustible para abastecer a su país.
«Saludamos y le damos la bienvenida a los barcos de la República Islámica de Irán, bandera de Irán, próximos a arribar a los puertos de nuestra patria», escribió El Aissami, en su cuenta de Twitter, donde también consideró que esta cooperación energética «apunta al desarrollo integral» de ambos países.
La «cooperación energética entre Irán y Venezuela se fundamenta en el intercambio científico y del desarrollo productivo de la industria de hidrocarburos, además de la experiencia que nos une como países OPEP. Gracias, hermanos», agregó el también ministro venezolano de Petróleo.
El buque iraní llamado Fortune (Fortuna), una vez que cruzó la frontera marítima con Trinidad y Tobago hacia territorio venezolano fue escoltado por naves y aviones de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) hacia su destino final, que será una de las refinerías de Venezuela, tal y como explicó la Guardia Nacional Bolivariana en su cuenta oficial en Twitter.
Una vez en aguas territoriales navegarán por aproximadamente cuatro días bajo la custodia soberana de la FANB hasta descargar el combustible.
Autoderminación y soberanía
Para muchos analistas, este es un hecho histórico en el que Irán exporta combustible por primera vez hacia Latinoamérica, con lo que envía un mensaje al mundo y sobre todo a Estados Unidos, de que ejercen el libre derecho al comercio, a la libre navegación, a la autodeterminación de los pueblos y se enmarcan en la solidaridad internacional en estos tiempos de pandemia por el nuevo coronavirus.
En medio de intentos del imperio norteamericano por amenazar la cooperación entre ambas naciones, víctimas de ilegales medidas unilaterales y coercitivas impuestas desde la Casa Blanca, la llegada de estas embarcaciones representa un alivio para el pueblo venezolano, afectado por los bloqueos que han impedido la llegada de aditivos para procesar la gasolina.
Durante las últimas semanas, y en medio de la cuarentena voluntaria y social decretada por la pandemia de COVID-19, se han registrado en las proximidades a las estaciones de servicio interminables colas de vehículos que esperan durante varios días un cupo para abastecer sus tanques. Una escena inusual en un país que se hizo famoso por vender la gasolina más barata del mundo.
Amenazas de EE.UU.
El Gobierno de Estados Unidos ejerció presión y lanzó amenazas para tratar de impedir, sin éxito, que los tanqueros llegaran a las costas venezolanas.
Sin embargo, Teherán advirtió que si Wsshington intercepta los barcos que navegan hacia Venezuela “estaría asumiendo un riesgo muy peligroso”, lo que sugiere que podría comenzar una nueva escalada de las tensiones.
El ministro de Exteriores iraní, Mohamed Javad Zarif, le escribió una carta al secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, advirtiendo que cualquier medida estadounidense contra el envío hacia Venezuela sería considerada un acto de piratería y tendría repercusiones.
Venezuela también envió una comunicación a la ONU alertando las pretensiones del Gobierno de Donald Trump de intentar impedir la entrada de los buques, en lo que podría constituirse en un flagrante acto de guerra y un delito de lesa humanidad.
Mientras que el ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino López, advirtió que los barcos iraníes serán escoltados por la FANB cuando entraran en la zona económica exclusiva venezolana.
Con el arribo del tanquero, Venezuela e Irán, dos naciones sometidas a las sanciones unilaterales del gobierno estadounidense afianzaron sus lazos de cooperación y ratificaron ante el mundo su derecho a la autodeterminación.
El pueblo venezolano celebró la llegada del combustible iraní. En las redes sociales se hizo viral la imagen de un grupo de jóvenes que izaron la bandera de la república islámica como símbolo de agradecimiento.
Asimismo, los dirigentes y militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) agradecieron la solidaridad de Irán con el pueblo venezolano.
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