El director del Departamento para América Latina del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, Alexander Schetinin ha criticado duramente este jueves la postura adoptada por la Casa Blanca contra la Venezuela de Maduro, aseverando que las sanciones impuestas frenan significativamente el avance socieconómico del país latinoamericano.
En declaraciones recogidas por la agencia rusa de noticias RIA Novosti, Schetinin ha calificado de «destructiva e irracional» la política de Washington:
“En nuestra opinión, la política de EE.UU. hacia Venezuela es muy destructiva e irracional. ¿De hecho, qué actitud muestran nuestros colegas estadounidenses? En primer lugar, ellos no creen en la victoria de la oposición. Con ello se afecta duramente el prestigio de la oposición”, ha sostenido el representante de la Cancillería rusa, quien ha asegurado que Moscú no cuestiona la legitimidad de las elecciones presidenciales de Venezuela que se celebrarán el próximo 20 de mayo.
En la misma línea, Schetinin ha acusado al gobierno de Trump de tratar de crear un caos supuestamente controlado y empeorar las condiciones de vida de los venezolanos con el objetivo de alcanzar unos determinados objetivos en el ámbito internacional:
«Se tomó un curso hacia la provocación de caos ―se cree que es controlado, pero este ‘control’ es muy limitado― y hacia el empeoramiento artificial de la situación socioeconómica del país«, sostuvo, añadiendo que lo que está haciendo EEUU es fomentar la rebeldía entre la población venezolana mediante «una provocación por la falta de dinero, por crisis alimenticia y de fármacos».
Para Schetenin, el empeoramiento de la vida en Venezuela «está causado en gran medida precisamente por la línea destructiva de las sanciones en relación a Venezuela por parte de jugadores externos, en primer lugar, por parte de EE.UU.»
Nuevas sanciones
Cabe recordar que el pasado mes de febrero, un día antes de que finalizara el proceso de venta de la criptomoneada venezolana petro, Washington firmó una orden que prohibía la realización de transacciones con ella.
Así mismo, el pasado mes de marzo, la administración estadounidense sancionó a cuatro funcionarios venezolanos, a los que acusa de malos manejos económicos y actos de corrupción.
Recientemente, la Casa Blanca ha anunciado nuevas medidas contra Caracas, justificando la asfixia al país venezolano en que es necesario frenar la supuesta «represión de la democracia», excusas que son rechazadas desde el país suramericano, donde aseguran que el fin único de la administración Trump es acabar con Maduro.
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