Gatillo fácil: un joven fue baleado por la Metropolitana en La Boca

Lucas Cabello recibió tres disparos por parte de un agente de la Policía Metropolitana en la puerta de su domicilio en Martín Rodríguez 559, en el barrio de La Boca. Allí, hace tiempo que hay policías de consigna por un caso de amenazas de dos familias vecinas. Según versiones de testigos, el joven, quien estaba volviendo a su casa -una solución habitacional del Gobierno de la Ciudad para aquellas personas que esperan por un techo- de comprar comida, discutió con un policía quien respondió con los múltiples disparos de su arma.

«Puedo asegurar que se trató de un accionar ilegítimo de la fuerza de seguridad del gobierno de la Ciudad, que de una manera absolutamente impune disparó contra Lucas», afirmó Gabriela Carpinetti, abogada querellante de la familia Cabello. La institución policial, en cambio, difundió una versión en la cual Lucas estaría armado, desmentida por todos los testigos quienes, además, señalan que la víctima cayó luego del primer tiro.

«Mi hijo había ido a comprar dos sandwiches de milanesa a la esquina y cuando vuelve le dispara; la nena desde adentro de la casa lo ve todo y los vecinos cuentan lo mismo – declara el padre de Lucas, haciendo referencia a la hija de dos años de la víctima quien vio cómo sucedía el hecho-. Este fue un caso de gatillo fácil, quizá hubo alguna discusión, eso no lo sé, pero nunca justifica que le dispare, y fueron dos tiros primero y después un tercero cuando estaba en el piso».

«Toda la comunidad está muy consternada, lo que da cuenta del aprecio de la gente por este chico. Si fuera un pibe violento que anda armado, los vecinos no estarían desde ayer haciendo vigilia en el Argerich», agregó Carpinetti, quien también representa a la familia Mur en el caso de los chicos fallecidos en el taller clandestino el pasado 26 de febrero.

De acuerdo a los vecinos de la zona, Lucas no estaba armado, «es un bueno chico» y «nunca hubo problemas con él».

Por su parte, el efectivo acusado fue detenido en la comisaría 24 de la Federal por algunas horas y actualmente se encuentra a disposición del Juzgado de Instrucción Nacional.

Mientras tanto, Lucas está internado en el Hospital Argerich en estado grave y su familia espera por el parte médico, aunque el padre de Lucas precisó que ya le informaron que una de las balas destrozó la médula de su hijo y que por lo tanto no va a poder volver a caminar ni a utilizar las manos.

Las declaraciones de María Eugenia Vidal

Ante estos hechos, la vicejefa del gobierno porteño y gobernadora electa por la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, declaró públicamente que «en origen» se trata de un caso de violencia de género.

«Es un absoluto desconocimiento, esto es un claro hecho de violencia institucional, mencionar que es violencia de género en el transcurso de una investigación en marcha y mientras Lucas Cabello se debate entre la vida y muerte es de una irresponsabilidad absoluta» respondió Carpinetti.

La organización #Ni Una Menos también salió al cruce de los dichos de Eugenia Vidal y difundió un comunicado titulado «No en nuestro nombre» en donde rechazan la versión de la vicejefa de gobierno -coincidente con la de la policía y contraria a la de los testigos y vecinos- y condenan la justificación de la violencia institucional con la violencia machista.

Vidal hoy por la mañana dio una conferencia de prensa en donde relató que «se le había dado un botón antipánico a la pareja de esta persona y se agregó una consigna policial, para otorgarle protección a la mujer».

«Ella salió de su casa gritando, con el dato de que había denunciado que su pareja la había amenazado de muerte, y el agente le dio a él la voz de alto, pero (Lucas) no atendió el pedido y ahí se generó la reacción de la policía», agregó Vidal.

Esta versión ni siquiera es respaldada por la pareja de la víctima.