El jefe de Estado, en un breve acto en el que estuvo acompañado por los ministros Ricardo Buryaile (Agroindustria), Alfonso Prat Gay (Hacienda) y Francisco Cabrera (Producción), y el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, subrayó que “algunos insisten en hacernos creer que no estamos para más”.
Más adelante afirmó que «sabemos que no la han pasado bien, que han sido años difíciles, que tuvimos la oportunidad de exportar al mundo, pero la falta de visión del gobierno anterior no nos permitió aprovecharlo”. “Ahora los precios cayeron, el mundo está más complicado”, prosiguió el mandatario, quien confirmó la extensión de “un puente de 90 días para ayudarlos, con el precio sostén, o régimen compensatorio, con los créditos, y empezar a trabajar para recuperar todos los mercados de exportación que podamos”.
Por su parte, Lifschitz destacó el “gesto muy importante» de haber hecho el acto «en el interior del interior», en lugar de haberlo en la Casa Rosada. El gobernador precisó que “se trata de un acuerdo para promover a un sector muy castigado por la situación económica internacional, pero también por la falta de políticas activas del gobierno nacional”.
El programa para atender la crisis lechera abarca a Santa Fe, Córdoba, Buenos Aires y Entre Ríos, y consiste, entre otras medidas, en un subsidio de 40 centavos por litro para tamberos durante el primer trimestre de 2016 y un paquete de créditos blandos de entidades oficiales.
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