Dentro del ambiente periodístico suele decirse que nadie, ningún personaje político resiste a un archivo. De eso puede dar fe el presidente de la nación argentina, Mauricio Macri, quien durante el debate presidencial contra el candidato del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, en noviembre del 2015, ante la reiterada pregunta del exgobernador acerca de las medidas de ajuste que ya pergeñaba el macrismo, el candidato de Cambiemos respondió: «Seguimos con las mentiras, ¿qué querés que te diga? No es verdad todas las cosas que relatás. Ya te he dicho que no vamos a hacer ajustes, que nosotros creemos en la expansión de la economía, en el crecimiento, que si a la gente le decimos la verdad, va a volver la inversión, va a volver el empleo. Pero, bueno, ya. Me rindo».
Cuatro meses después, el salario de los trabajadores sufre una fuerte contracción resultado de los aumentos de los productos básicos alimenticios -consecuencia de la devaluación, la consecuente suba del dólar y la eliminación a las retenciones, todas decisiones del macrismo-, el tarifazo al consumo de la electricidad, entre las subas de otros bienes y servicios.
Ahora, el ministro de Producción, Francisco Cabrera, confirmó un aumento de tarifas de hasta 500% en el servicio de agua, de 300% del gas y de 70% a 150% del transporte.
De acuerdo al diario Página/12, el funcionario macrista, al exponer en una jornada del Banco Interamericano en el Hotel Hyatt, utilizó el eufemismo de «normalización de la economía» para confirmar un «reacomodamiento de tarifas» que será anunciado por el gobierno nacional en los primeros días de abril.
Cabrera además prometió que tras este megatarifazo, «entre agosto y septiembre finalizará el proceso de normalización económica» que permitirá, según el ministro, que empiecen a descender los índices de inflación.