Susana Malcorra, consideró que «para el primer trimestre del año ya habrá una propuesta formal de la Unión Europea» en el marco de las negociaciones por un acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y ese bloque regional, aunque aclaró que una exigencia argentina será que «la propuesta de ellos incluya la cuestión agrícola».
Además, confirmó que el presidente Mauricio Macri participará de la cumbre de Davos a mediados de enero y que, como anticipó Télam en noviembre pasado, la vicepresidenta Gabriela Michetti ocupará un rol activo en las visitas al exterior para que Macri pueda estar el mayor tiempo posible en Argentina.
–El Gobierno insiste sobre la cuestión de los DDHH en Venezuela, pero situaciones complejas con los DDHH se dan en otros países socios de la Argentina, como China o Rusia.
-Primero que nada, el principio de los derechos humanos es un principio que vamos a manejar siempre, en todas las circunstancias y negociaciones. Venezuela es un socio del Mercosur, entonces la relación con Venezuela no es la misma que con China o que cualquier otro país del mundo.Lo que tenemos que trabajar es, como grupo, empezar a hacer un espacio modelo del tratamiento de los derechos humanos. La canciller de Venezuela fue muy explícita en que ella quería enfatizar los derechos humanos en un sentido más amplio, y nosotros coincidimos en eso. Esto es una cuestión del Mercosur que aplica a todos los socios del Mercosur, no aplica solo a uno o a otro. Nos aplica a nosotros también.
–¿Cómo evalúa el impacto que tuvo este reclamo al gobierno venezolano?
-Yo creo que hubo un reconocimiento de que el Presidente fue muy claro, muy directo, y como tal creo que sirvió para cristalizar esta declaración de la cual acabamos de hablar. De cualquier forma, la reunión del Mercosur tuvo también otros aspectos. A veces corremos el riesgo de sesgar la discusión en un solo sentido y perder de vista que hubo muchos temas que se discutieron, en los que hemos encontrado puntos en común. La negociación con la Unión Europea, que es central a lo que es el Mercosur, estuvimos de acuerdo y vamos a avanzar.
–En esta discusión por un acuerdo comercial, Argentina en su momento no había llegado a ofrecer apertura en el 80% de lo que se comercia, ¿la Argentina está avanzando en una oferta más importante? ¿Se está esperando que Europa haga una oferta en agricultura?
-La oferta global del Mercosur está casi en el 87%, un poco por debajo. Europa está pidiendo que lleguemos al 90%, les hemos explicado que 87% es el piso, que trabajaremos para mejorarla. Tenemos que poner las propuestas sobre la mesa, y la propuesta de Europa sin lugar a dudas tiene que incluir la cuestión agrícola. Europa nos ha dicho que está en condiciones de hacerlo en unas pocas semanas, nosotros tenemos aspiración a que esto en el primer trimestre del año se ejecute, estén las propuestas sobre la mesa y eso fue lo que acordamos por otro lado en la cumbre, y que entonces empecemos a partir de ahí a mover ya en concreto para acercar posiciones. Porque tampoco podemos hablar de nuestra propuesta sin ver la propuesta del otro lado.
–Con respecto a preservar la sustitución de importaciones de Argentina, ¿qué tipo de recaudos debe haber? Es el primer temor ante un tratado de libre comercio.
-Es un temor sobre el cual tenemos que trabajar. Ninguno de estos tratados se produce del día a la noche. Cualquier tratado tiene una gradualidad para la implementación. Esta gradualidad tiene que ver con el hecho de dejar el tiempo para la maduración de las distintas industrias y sectores para llegar a la competitividad necesaria para reubicarse en distintos nichos. El objetivo que nosotros tenemos es de Pobreza Cero, y se logra de manera sustentable con trabajos de calidad y valor agregado. Me parece que la noción de que cerrándonos tenemos más oportunidades de trabajo es una noción que está desvirtuada por ejemplos concretos. El caso de Chile, que está del otro lado de la cordillera, que tiene un mercado más pequeño, ha demostrado que pueden ser capaces, dentro de una inserción que es planificada, que no tira por la ventana las cosas de un día para el otro. No hay una intención ni una posibilidad de que las puertas se abran de un día para el otro para que entre cualquiera.
– ¿No condicionan entonces los socios que todavía no se integraron plenamente las negociaciones del Mercosur?
-Venezuela de momento es socio pleno, si bien todavía no ha implementado todos los protocolos del Mercosur, y Bolivia está en proceso de acceso. Cuando acceden al Mercosur acceden a estos instrumentos y como tales tienen que adherir a ellos. Yo no creo que ninguno de los dos esté reticente a eso. Tenemos que ser muy directos, tanto el canciller uruguayo como el presidente Tabaré Vázquez, dijeron que hay cierta fatiga porque las idas y vueltas en algunas cuestiones han postergado decisiones. No tenemos más tiempo para eso.
– En estos días el ministro Andrés Ibarra oficializó la revisión de los contratados de la administración pública. ¿Con qué se encontró usted cuando llegó aquí y si también está revisando las contrataciones?
Lo que anunció el ministro Ibarra es una política que aplica a todos nosotros. Yo he pedido tener un inventario de toda la situación, todavía no lo he visto. Lo que sí me parece es que la Cancillería tiene como gran valor agregado es que ha institucionalizado una carrera que es muy importante. Lo que sí he notado es que ha habido un crecimiento muy grande del área administrativa del ministerio. Quiero mirarlo, quiero mirar exactamente cuáles son las áreas, el por qué, qué cosas son totalmente genuinas y válidas, qué cosas hay que revisar. Y por eso este decreto que anunció el ministro Ibarra nos da tres meses, en los cuales vamos a encarar un trabajo serio y a partir de allí tomaremos decisiones.
– De los últimos cinco años del ex canciller Timerman, ¿cuáles serían las políticas de las que usted cree que hay que desandar el camino?
– Creo que algunas cuestiones se han manejado en un sentido de blanco o negro, que a mí me parece no son la mejor forma de defender los intereses de la Argentina. Me parece que lo que tenemos que mirar es que en aquellos casos en los cuales tenemos diferencias trabajar sobre esas diferencias sin dejar de reconocer que por allí hay áreas de oportunidades. Esto aplica a la Argentina en general. Yo hace doce años que estaba afuera de la Argentina. Mi gran sorpresa de volver es que todo es dicotómico. O estás conmigo o estás en contra, o sos bueno o malo. No es así, la vida es una gran variedad de matices y de grises y sobre eso tenemos que movernos.
Funte: Telam