La exdiputada hondureña Carolina Echeverria fue asesinada en la noche del domingo en su residencia por hombres armados en Tegucigalpa, la capital de Honduras.
El esposo de la política, el excomandante de policía y abogado, Wilfredo Urtecho Jamborde, resultó gravemente herido en el intento de asalto y se encuentra recibiendo cuidados médicos en un hospital de la capital hondureña.
Echeverría, quien fue parlamentaria entre 2006-2010, falleció a causa de las heridas de bala, según un informe preliminar de las fuerzas de seguridad que acordonaron la escena del crimen.
La información aportada por los organismos de seguridad indica que los asesinos de la exdiputada ingresaron a la vivienda fingiendo ser personal de salud, disfrazados con trajes de bio-seguridad ya que Carolina Echeverria y su esposo se encuentran positivos la Covid-19.
El crimen contra la exdiputada Echeverria fue condenado por sectores políticos y sociales hondureños.
El candidato presidencial del Partido Liberal, Yani Rosenthal, lamentó el asesinato de Carolina Echeverria e instó a la fuerzas policiales a investigar, encontrar y castigar a los responsables del crimen.
También el excandidato presidencial Luis Zelaya condenó el asesinato de la exdiputada y expresó sus condolencias a la familia.
Nacida en el departamento de Gracias a Dios, fronterizo con Nicaragua, Echeverría aspiraba de nuevo a una diputación por el Partido Liberal, segunda fuerza de oposición en el país centroamericano.
El 28 de noviembre de 2021, Honduras celebrará elecciones generales, en las que serán electos un presidente, tres vicepresidentes, 298 alcaldías municipales, 128 diputados al Parlamento local y 20 al Centroamericano.
La violencia en Honduras deja un promedio diario de entre 10 y 11 asesinatos, según autoridades locales, que atribuyen gran parte de la criminalidad a pandillas y grupos del crimen organizado y el narcotráfico.
(Con información de Telesur, EFE y 20Minutos)