La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) avaló el proyecto denominado “Desarrollo Inmobiliario Aerogolf”, en Quintana Roo, promovido por el Club de Pilotos Isla Cozumel, S. A. de C.V., y aseguró que cuenta con autorizaciones de carácter federal y estatal.
Durante un sobrevuelo por la zona, la Profepa verificó que no existe remoción de vegetación forestal ni construcciones recientes.
Diversas denuncias ciudadanas alertaban sobre un plan de edificación de hoteles, residencias, tiendas departamentales, canales y lagunas artificiales, en la zona de playa Corona, cerca del Área Natural Protegida de Chankanaab.
Ante esto, la dependencia aseguró que el Club de Pilotos Aerogolf cuenta con una autorización en materia de Impacto Ambiental Federal otorgada mediante oficio SGPA.DGIRA.DG.1174/09 de fecha 3 de abril de 2009, por la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA) de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).
Asimismo, se tuvo conocimiento que dicho proyecto cuenta con la autorización estatal INIRAQROO/DG/DIA/064/2008 otorgada el 27 de marzo de 2008 por el Instituto de Impacto y Riesgo Ambiental del Gobierno del estado de Quintana Roo.
El predio donde se encuentra el club, es de 580 hectáreas y el aeródromo que es de servicio público, ocupa 7.9 hectareas y cuenta con pista, franja de seguridad, calle de rodaje, niveles de eje, rosa de los vientos, hangar, oficinas, áreas verdes, laguna, alambrado y franja de vegetación perimetral de amortiguamiento con 6 años de funcionamiento.
Durante la visita de inspección, la Profepa determinó la condición natural de la vegetación en el predio, identificando la presencia de selva mediana subperennifolia, ecosistema que es de vital importancia para hacer frente a los ciclos ecológicos de la isla que sufre de abatimientos por huracanes, sin encontrar obras en proceso de construcción.
Cabe destacar que el Club de Pilotos Isla Cozumel, S. A. de C.V fue sancionado en tres ocasiones por la Profepa en agosto del 2008 y en 2010.
La primera sanción que se le impuso en 2008 fue una multa en materia de impacto ambiental por 50 mil pesos, por el incumplimiento de medidas de mitigación.
La segunda ocasión la multa ascendió a 210 mil pesos en materia forestal; y una tercera sanción se aplicó en marzo del 2010, también en materia forestal, por 21 mil pesos y la imposición de cumplimiento de medidas de mitigación y restauración.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente informó que vigilará la zona de manera constante para que no se desarrollen actividades sin las autorizaciones correspondientes.
El Ciudadano