Consideró como errados los augurios de los analistas en cuanto a la asfixia y ahogamiento de la economía boliviana y señaló que su nación tendrá ingresos por la venta de gas hacia Argentina y Brasil.
También dijo que la economía boliviana crece más que la del resto del continente americano, pues por la fortaleza de los siete pilares fundamentales tales como: Retención del excedente económico, la redistribución y ampliación del mercado interno, la inversión estatal creciente, el elevado ahorro interno, la bolivianización del sistema financiero, la articulación del capital bancario con el sector productivo y la diversificación económica.
Indicó que el Estado tiene un papel central, rector, regulador en el modelo económico y no asfixiante ni totalizador y manifestó que el sistema financiero se ha bolivianizado, permitiendo generar resortes, frenos e incentivos, para la creación de mecanismos que impulsen el crecimiento de la economía.
Reconoció que a este logró se suma la distribución de las riquezas, manejo equitativo de los recursos que ha contribuido al mejoramiento de los ingresos en sectores populares, consolidación de la clase media y estabilización de los sectores con mayor poder adquisitivo.
«Si dependes de la inversión extranjera, del crédito extranjero, estás perdido, porque lo que hacen ellos es imponerte sus condiciones«, alegó el vicepresidente del país.