Los cultivos agrícolas destruidos durante este año en Bolivia por los fenómenos climáticos fueron menos respecto a los dos años anteriores, informa el Instituto del Seguro Agrario (Insa), en un reporte publicado este miércoles.
El titular del Insa, Erik Murillo, señaló que en 2016 hubo una significativa migración del campo a la ciudad y el ganado camélido tuvo pérdidas de hasta el 30 por ciento y el monto económico por cultivos siniestrados alcanzó los 32 millones de bolivianos (unos cinco millones de dólares).
El año pasado, los efectos de la sequía en algunas regiones del país causaron pérdida por 24 millones de bolivianos (más de tres millones de dólares), según refirió Prensa Latina.
Sin embargo, en 2018 el Insa aseguró 250 mil hectáreas de cultivos, de las cuales 99 mil fueron reportadas como afectadas y se concluyó que alrededor de 14 mil fueron siniestradas.
Ante ello, agregó Murillo, corresponde el pago por indemnización de 14 millones de bolivianos (dos millones de dólares).
El Insa paga mil bolivianos (144 dólares) por cada hectárea de cultivo destruido, monto entregado de forma directa al pequeño productor para reactivar su producción.
Murillo recordó que Bolivia implementó el Seguro Agrario desde 2011 y en la actualidad es único en Sudamérica porque trabaja en coordinación con los productores, comunidades rurales, municipios y el Gobierno nacional.
Las inclemencias del efecto climático
El año pasado el INSA reportó que en el país, durante el último periodo agrícola, las hectáreas siniestradas o golpeadas por fenómenos climáticos disminuyeron en un 70%.
El trabajo de evaluación de daños en el campo se encuentra en un 30% en 2017, respecto al reporte del año 2016. El Seguro Agrario cubre 315 mil hectáreas de cultivos trabajados por 168 mil familias productoras en todo el país.
Para este año, según el INSA, se tiene a disposición alrededor de 30 millones de bolivianos (cinco millones de dólares) para indemnizar cultivos perdidos por efectos climáticos.
En 2018 se espera gastar solo la mitad de estos recursos, por la reducción reportada hasta la fecha e indemnizar a los productores afectados con 15 millones de bolivianos.