Funcionarios brasileños que defiendan el comunismo serán destituidos de sus cargos, así lo autorizó este jueves el presidente del país amazónico, Jair Bolsonaro.
Ante el anuncio el ministro de la Presidencia, Onyx Lorenzoni, dio el primer paso e informó de la destitución de unos 300 empleados públicos con contratos temporales.
La decisión fue adoptada en la primera reunión del llamado Consejo de Gobierno. Igualmente se aprobó la venta de muchos de los 700,000 inmuebles propiedad del Estado, para contribuir a contener el elevado gasto público.
“Las primeras informaciones dicen que el Estado tiene cerca de 700,000 inmuebles” en todo el país, “lo que causa gastos inmensos de mantenimiento”, indicó el ministro.
Para lograr la depuración, Lorenzoni, manifestó en rueda de prensa que revisarán la estructura de la administración pública y destituirán a los funcionarios no alineados con las ideas de Bolsonaro.
El ministro aseguró que esta política forma parte de los “compromisos” asumidos por Bolsonaro durante su campaña electoral.
“No tiene sentido tener un Gobierno como el que tenemos ahora con personas que defiendan otras ideas u otra forma de organización de la sociedad”, declaró Lorenzoni.
La medida se aplicará en su mayoría para cargos considerados “de confianza” y abarcará todos los sectores de la administración pública.
El estudio revisará la necesidad de ubicar a nuevas personas en los diversos cargos o si serán definitivamente extintos.
Lorenzoni insistió en que todas esas decisiones serán tomadas con criterios “absolutamente técnicos”, que fueron los que Bolsonaro le ofreció a los brasileños en su campaña electoral, difundió el Nuevo Herald.
“Como dice el capitán, estamos para servirle a la sociedad y no a las ideologías”, afirmó el alto funcionario.
En esta primera reunión que Bolsonaro celebra con todos sus ministros desde su toma de posesión, se estableció también que el ministro de Economía, Paulo Guedes, presentará un proyecto para la reforma del actual régimen de jubilaciones, que es considerado uno de los principales factores de presión sobre el gasto público.
Catalogó el régimen de jubilaciones como un asunto clave para el Gobierno. “Vamos a hacer la reforma y punto”, subrayó.
Concesiones al sector privado
El Gobierno terminará de elaborar una primera fase de un plan de concesiones para el sector privado en el área de infraestructura, este contempla aeropuertos, puertos y ferrocarriles, según anunció el propio Bolsonaro este jueves en sus redes sociales.
«Rápidamente atraeremos inversiones iniciales en torno a R$ 7 mil millones, con concesiones de ferrocarriles, 12 aeropuertos y 4 terminales portuarias. Con la confianza del inversor bajo condiciones favorables a la población rescataremos el desarrollo inicial de la infraestructura de Brasil», difundió Bolsonaro a través de la red social twitter.
Rapidamente atrairemos investimentos iniciais em torno de R$ 7 bi, com concessões de ferrovia, 12 aeroportos e 4 terminais portuários. Com a confiança do investidor sob condições favoráveis à população resgataremos o desenvolvimento inicial da infraestrutura do Brasil.
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) January 3, 2019
El mandatario del país suramericano calculó que esa primera fase de concesiones puede atraer inversiones al país del orden de los 7,000 millones de reales (unos 1,842 millones de dólares).
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