El pasado 28 de octubre durante los comicios realizados en la República Federativa de Brasil, resultó electo Jair Bolsonaro como el nuevo presidente, para ejercer el cargo desde el 1 de enero de 2019 hasta el 1 de enero de 2023. Su posición ultraderechista vaticina un giro en la política medioambiental, lo que traería consecuencias no solamente para sus habitantes, sino para todo el mundo.
El ganador de las elecciones presidenciales ha anunciado medidas catastróficas que dejarán aún más vulnerable a la mayor reserva forestal del mundo, la Amazonia. El portal web Ecoosfera, recoge como indicativos de este escenario los siguientes aspectos:
Explotación de la tierra
Los anuncios por incrementar la producción agrícola contemplan la necesidad de destinar nuevas hectáreas para la siembra de rubros como la soja. Además, la fusión de ministerios de Agricultura y Medioambiente, evidencia que la política ambiental quedará relegada a la agresiva explotación de la tierra.
Subestimar Ministerio del Medioambiente
Una de las primeras promesas de campaña que ya está siendo implementada es la fusión de dos ministerios contrapuestos, el de la explotación y el de conservación medioambiental. Además, Paulo Guedes, el principal asesor económico del presidente electo, también confirmó la formación de un «súperministerio» de economía, integrado por finanzas, planificación, industria y comercio.
Ignorar impacto de la tala
En una entrevista realizada en el mes de abril, Bolsonaro afirmó que la causa de la deforestación en la Amazonia no es la tala excesiva, sino el aumento de la población.
Despojo de tierras
Cuando aún era precandidato a la presidencia, afirmó que no demarcaría las tierras indígenas, una exigencia histórica que garantizaría la conservación de sus modos de vida. En sus palabras, «el indio ya tiene demasiada tierra (…) Ni un milímetro para tierras indígenas».
Abandonar el Acuerdo de París
Bolsonaro planea retirar a Brasil del Acuerdo de París para reducir las emisiones de carbono antes de 2030, a menos que se asegure que continuar no signifique ceder la soberanía a las naciones indígenas ni la jurisdicción internacional sobre la Amazonia.
Industrialización de la Amazonia
Bolsonaro prevé llevar a cabo su ambicioso proyecto de abrir una carretera a través del Amazonas y concesionar nuevos proyectos de explotación.
Pase libre para la minería
El presidente electo ha prometido destinar las tierras indígenas a la explotación minera y forestal, bajo el pretexto de que los indígenas podrán vivir de esas regalías.
Prohibir la entrada a observadores internacionales
Otra promesa de campaña fue impedir la entrada al país de organizaciones de cuidado ambiental como Greenpeace y la World Wildlife Fund.
Construcción de plantas nucleares
Se tiene previsto la culminación de la construcción de Angra 3, una planta nuclear en la costa, entre las regiones de Sao Paulo y Río de Janeiro. Esta planta se complementará con una gran represa hidroeléctrica en Belo Monte, sobre el río Xingú, que forma parte del complejo pluvial del Amazonas.
Ambientalistas en peligro
Brasil es el país más peligroso del planeta para los defensores de la tierra, con 207 asesinatos desde 2017, seguido peligrosamente por Filipinas (48), Colombia (24) y México (16).
A.L.
https://www.elciudadano.cl/medio-ambiente/amazonia-brasilena-a-la-venta-en-nombre-del-petroleo-y-del-gas/11/01/
https://www.elciudadano.cl/latino-america/comienza-plan-de-la-derecha-para-erradicar-el-comunismo-del-continente-oposicion-venezolana-pide-intervencion-militar-a-bolsonaro/10/31/