Candidato de la ultraderecha brasileña amenaza con fusilar a todos los simpatizantes del PT

El candidato de la extrema derecha brasileña, Jair Bolsonaro, quien marcha segundo en las encuestas detrás de Lula Da Silva, incitó este fin de semana a sus seguidores a “fusilar” a los simpatizantes del Partido de los Trabajadores (PT).

Este lunes, el equipo de asesores de Bolsonaro intentó recoger el agua derramada. Indicaron que todo se “trató de un juego, como siempre”. En ese contexto el PT anunció su decisión de acudir a la justicia para denunciar al candidato de la ultraderecha por “crímenes de injuria electoral, amenaza e incitación al homicidio”.

El pasado sábado, Bolsonaro empuñó un trípode de cámara, cuál si fuera un fusil de asalto y exclamó en un mitin: “vamos a fusilar a todos los petistas de aquí de Acre” (estado del centro-norte brasileño). Agregó: “ya que gustan tanto de Venezuela, se van a tener que ira para allá, sólo que por allá no tendrán mortadela. Tendrán que comer pasto”.

La abogada del PT, Raquel Dodge, denunció que la justicia brasileña atropella los plazos para inhabilitar la candidatura de Lula Da Silva, mientras que evita tomar medidas con respecto al fascismo explícito de Bolsonaro.

Otras expresiones fascistas del candidato

A lo largo de sus mas de 30 años de carrera como parlamentario, Bolsonaro no ha ocultado su pensamiento reaccionario. En 1993, en la propia tribuna de oradores de la Cámara de Diputados se proclamó en favor de la dictadura que gobernó a Brasil.

En el año 2017, expresó que si llegaba a la Presidencia de la República acabaría con las reservas indígenas y las llamadas «quilombolas», asentamientos donde se refugiaron en la época de la esclavitud los rebeldes y donde ahora habitan sus descendientes. En referencia  a los residentes de las quilombolas afirmó que estos «no servían ni para procrear».

En el 2015, fue multado luego de afirmar que la diputada Maria Do Rosario «no merece ser violada, ella es muy fea».