Cada año se vierten en el océano 13 millones de toneladas de plásticos, inclusive bolsas que son ingeridas por los animales marinos o aves, conllevando no solo a la muerte de estas especies, sino que para el 2050 exista un mar de desechos por descuido de los pobladores, según revelaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En vista de una solución corresponsable con el medio ambiente, un grupo de emprendedores chilenos fabrican bolsas plásticas y de tela reutilizable solubles en agua y que no contribuyen con la contaminación.
De acuerdo a los científicos, la elaboración del producto biodegradable inició haciendo un cambio leve en la fórmula del plástico sustituyendo el petróleo por la caliza en la creación de detergentes.
Según Roberto Astete y Cristian Olivares de la empresa SoluBag, indicaron que la fórmula química está basada en alcohol de polivinilo soluble en el agua (PVA) lo que permite reemplazar los derivados del petróleo que deterioran el medio ambiente y los océanos.
Anunciaron que las bolsas ecológicas estarán disponibles en la nación chilena a partir del mes de octubre, país que se convirtió en uno de los primeros países de América Latina en vetar el uso de las bolsas plásticas convencionales por los comercios.
«Esto es como hacer pan. Para hacer pan se necesita harina y otros componentes. Nuestra harina es el alcohol de polivinilo y otros componentes, aprobados por la FDA (la agencia estadounidense para la regulación de alimentos, medicamentos, cosméticos, aparatos médicos, productos biológicos y derivados sanguíneos), que nos ha permitido una materia prima para hacer distintos productos», explicó uno de los empresarios.
Astete, manifestó que las bolsas plásticas biodegradables son solubles en agua fría y las reutilizables de tela en agua caliente.
«En el agua se queda el carbono y las pruebas médicas han demostrado que este no tiene efectos contrarios al cuerpo humano«, dijo al beberse el agua turbia para demostrar que el líquido sigue siendo potable.
«La gran diferencia entre el plástico tradicional y el nuestro es que aquel va a estar entre 150 y hasta 500 años en el medio ambiente y el nuestro solo demora cinco minutos. Uno decide cuándo lo destruye», expresó Astete al reiterar que la «máquina recicladora puede ser la olla de tu casa o la lavadora».
Otros materiales solubles
Los creadores de esta iniciativa explicaron que la fórmula a base de carbono permite elaborar cualquier otro material de plástico, cuyo motivo están creando cubiertos, platos o envases.
Así lo informó Cristian Olivares, al detallar que con la misma agua caliente que se utiliza para las bolsas de telas reutilizables, se pueden fabricar productos hospitalarios desechables entre ellos, protectores de las camillas, batas y gorros del personal médico y pacientes.
Programación de temperatura
Los científicos aseguraron que las novedosas bolsas plásticas poseen un programador de temperatura para que estas no se disuelvan con el contacto con la lluvia.
Otra de las ventajas que oferta ésta invención, son antiasfixia para niños, puesto que con las lágrimas o la lengua pueden disolverse fácilmente.
Se prevé que el costo de las bolsas será similar a las contaminantes actuales; los emprendedores están dispuestos a empoderar a los clientes para la elaboración de más recipientes flexibles que permitan ayudar a descontaminar el medio ambiente.
Reconocimiento
Los inventores han sido galardonados con el premio SingularityU Chile Summit 2018 como emprendimiento catalizador de cambios, así como podrán optar por unas pasantías en Sillicon Valley a partir de septiembre.
https://www.elciudadano.cl/chile/greenpeace-llama-los-supermercados-eliminar-las-bolsas-plasticas-chile/12/15/